El segundo equipo benjamín del Celta inició la segunda fase de la liga local con el triunfo ante el Tyde por 7-2 y de esa forma se mantiene en la senda de las victorias. En la parte inicial, el equipo dirigido por Adrián Abalo logró ganar todos los encuentros que disputó. Ahora, en el grupo 82 de la competición viguesa, afrontará doce partidos con el desafío de mantener su regularidad. Sin embargo, el gran reto del entrenador es que "los jugadores sigan aprendiendo la mecánica de trabajo, entrenamientos y partidos. La verdad es que se han acoplado muy bien".
Todos los futbolistas llegaron el pasado verano a la cantera céltica, ya que es el último equipo que se diseñó. Este detalle no supone un problema para el técnico. Afirma que "son como esponjas. Asimilan los conceptos muy rápido y además tienen una ilusión muy grande. Cada partido para ellos es como un gran reto". Adrián Abalo, que cumple su segunda temporada en el club vigués, reconoce que "la generación que tenemos en los benjamines es magnífica, pero hay que darles tiempo".
