El Racing de Ferrol demostró ayer ante el Sporting de Gijón B el por qué de su liderato. Los departamentales tuvieron la suficiente paciencia para ir madurando a un rival que no se dio por vencido hasta el tramo final del partido. Casi como milagro, Nano Macedo marcó y la alegría estalló. Ya era el 87. Se unió Borja Domínguez superado el tiempo reglamentario con un excelente tanto. Tres puntos a última hora para ampliar la ventaja desde lo más alto.