Carlos Clos Gómez, árbitro adscrito al comité aragonés, será el encargado de dirigir el primer asalto de la semifinal copera que enfrentará el próximo jueves al Celta y el Sevilla en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán. El Celta no guarda buen recuerdo de este colegiado, que expulsó a Gustavo Cabral por hacer aspavientos en el duelo disputado frente al Real Madrid en Balaídos y propició luego una sanción de tres partidos (uno por la expulsión y otros dos desconsideración) al jugador celeste , al que acusó de llamarle "cagón de mierda", algo que Cabral siempre ha negado.

Clos Gómez mostró a Cabral la segunda tarjeta amarilla después de que el zaguero celeste protestase una clara falta de un jugador del Real Madrid al chileno Pablo Hernández que el árbitro había obviado de forma evidente. Además de expulsarle, el árbitro señaló en el acta del choque: "Tras ser expulsado, prosiguió en sus protestas, teniendo que ser apartado por sus compañeros. En esos mismos instantes, se dirigió a mi en los siguientes términos: "¡Cagón de mierda!". Aunque Cabral negó que tales palabras salieron de su boca, Competición le suspendió por tres partidos.

Bastante mejor ha caído la designación de Juan Martínez Munuera para el encuentro de vuelta de la semifinal copera. El colegiado valenciano no solo está considerado como uno de los mejores árbitros del momento, sino que se ha mostrado talismán para el Celta, que no ha perdido uno solo de los siete partidos que le ha dirigido (cinco triunfos y dos empates) en cuatro partidos en Segunda, dos en Primera y otro en la Copa del Rey.