El Celta ha fijado sus ojos en Guido Pizarro como recambio de Augusto Fernández. La contratación del mediocentro del Tigres de México puede complicarse debido a la reticencia del club de Nuevo León por desprenderse de uno de los pilares del equipo que conquistó el último Torneo Apertura y que aspira a llevarse también el Clausura, que arranca en unas semanas. Y en ese campeonato no hay necesidad de vender y cuando ocurre suelen exigirse importantes cantidades. Todo parece en contra, a priori, para que el Celta pueda hacerse con uno de los futbolista que agrada a Berizzo, como ayer reconoció el técnico en la rueda de prensa que ofreció en A Madroa.

"Pizarro está en la lista [de posibles incorporaciones]. Lo hemos mirado. Es un futbolista interesante, pero cada vez que doy un nombre...", se queja Berizzo de que sus opiniones sobre un determinado jugador adquieran gran relevancia en los medios de comunicación.

"Quisiera ser comedido porque realmente hay que serlo, no por un exceso de hermetismo. El hermetismo en este caso tiene que ver con una negociación rápida y limpia, para que no se complique la cosa", advierte el técnico al explicar la política del club sobre los fichajes.

Pizarro encaja en los planes de Berizzo. Al técnico del Celta le gusta su paisano, un mediocentro de 25 años que tras formarse en el Atlético Lanús se marchó a México. Antes, estuvo a punto de recalar en el Fiorentina. El club italiano estaba dispuesto a pagar 3 millones de euros pero la operación se frustró por problemas burocráticos. En julio de 2013 fichó por el Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León, con el que obtuvo el subcampeonato de la última edición de la Copa Libertadores. Cayó en Buenos Aires ante River Plate.

Pizarro, que ha adquirido la nacionalidad mexicana, es un futbolista fuerte, de 1,86 metros de altura, muy competitivo. En una ocasión salvó a su equipo de una derrota tras realizar una buena intervención como portero, pues habían expulsado al guardameta del Tigres en una acción anterior.

La alta cotización y la negativa del club mexicano a desprenderse de uno de sus jugadores de referencia están complicando que se cierre el traspaso de Guido Pizarro al Celta.

Berizzo, mientras tanto, espera contar cuanto antes con un futbolista que supla la marcha de Augusto al Atlético de Madrid. "El refuerzo lo esperamos con ansia y con necesidad también de aumentar el número de jugadores. Ojalá suceda pronto. Para mi tiempo, claro, se está demorando demasiado el fichaje de un mediocentro. Hubiese querido tenerlo desde hace unos días, pero también entiendo que las cosas no son tan simples a estas alturas del año y para elegir bien hay que pensar bien, hacer las cosas con calma y corrección", admite Berizzo al explicar el proceso para la contratación de uno de los dos refuerzos que espera en este mercado de invierno.

"Así que del acierto en la elección dependerá también mucho lo que nos pase en los próximos meses. Así que si eso necesita tiempo, que lo tenga porque creo que no podemos equivocarnos en la elección de gente que llegue. Tiene que ser gente que nos eleve", sostiene Berizzo.

El técnico sí desmiente que el Celta esté interesado en la contratación del centrocampista ghanés Kofi Adu, del Malmoe sueco. Tampoco parece interesar al equipo vigués el italiano Luca Cigarini, del Atalanta, que pasó por el Sevilla. Aparte de Pizarro, el técnico evita dar otros nombres. Reconoce que le gusta Chory Castro, que acaba de firmar por el Málaga tras abandonar la Real Sociedad, pero el club busca otro futbolista para la banda derecha del ataque. Esa posición y la del pivote son las que el Celta quiere reforzar en este mes.

"Opciones existen, así que llegarán. ¿Cuándo? Ojalá que sea pronto", subraya Eduardo Berizzo en referencia a los candidatos a suplir la vacante de Augusto Fernández y a reforzar el flanco derecho del ataque para que Fabián Orellana quede liberado de esa posición y pueda dedicarse en exclusiva a brillar como mediapunta.