El Choco despedirá el año ocupando una plaza de play off de ascenso a Segunda División B, después de sumar los tres puntos en el derbi comarcal ante el Rápido de Bouzas en el Baltasar Pujales.

La tarde no comenzaba bien para el Rápido de Bouzas, pues en el calentamiento Tomás se resentía de sus problemas de espalda y no podía jugar el encuentro. Además, algunos jugadores llegaron al encuentro todavía con cansancio tras el partido de Copa Federación disputado el jueves el Ciudad Rodrigo y del largo viaje de ida y de vuelta hecho en el mismo día.

Marcos Montes, entrenador redondelano, decía pocas horas antes de iniciarse el encuentro, que el partido se resolvería por pequeños detalles. No le faltaba razón al técnico, ya que un gol de Silva, tras pocos minutos de juego, decidió el encuentro. No cabe duda de que el tanto rompió el esquema previsto al inicio del encuentro, pues los redondelanos tenían el trabajo hecho y solamente tenían que limitarse a a guantar las acometidas de los aurinegros que, al contrario, tenían que apretar para lograr la remontada.

El partido fue vivo y atractivo para los aficionados que, en buen número, se dieron cita en el Municipal de Bouzas. Los dos equipos trataron de tener el control del balón en el centro del campo. Hubo muchas pérdidas y el esférico circulaba de un área a otra. A pesar de las circunstancias, los dos equipos tuvieron varias ocasiones que pudieron cambiar el marcador.

El cuadro aurinegro le metió una marcha más al partido. Jugar en casa y estar por detrás en el marcador, obligaba a dar un paso adelante, y los jugadores lo dieron. Oki fue uno de los jugadores más incisivos en ataque, tras las ausencias de Tomás y Gustavo Souto, unida a la suplencia de Carlos Pereira. El, en esa ocasión delantero, dispuso de hasta tres buenas ocasiones para igualar el encuentro, pero ayer no tuvo su tarde. Lo mismo que Iago Pérez y Manu, pero el marcador no se movió,.

El Choco, por su parte, tenía el encuentro controlado. Los redondelanos sabían que eran los boucenses los que tenían que arriesgar para buscar el empate, y por ellos esperaron al Rápido para recuperar el balón y salir con velocidad a la contra y marcar un segundo tanto que sentenciara definitivamente el encuentro.

La más clara fue para Hugo, quien se encontró con un inspirado Álex que metió una mano que evitó el segundo tanto, aunque también la volvió a tener Silva, pero su disparo salió fuera por muy poco.

En la segunda parte el encuentro dio un giro inesperado, a los pocos minutos de juego, tras la segunda amarilla de Comis. Jorge Otero no tardó en hacer el primer cambio con la entrada de Antón Vilas en el centro del campo. Poco a poco el Rápido se fue haciendo dueño del partido ante un Choco muy ordenado que no dejaba huecos por lo que los aurinegros crearan sus ocasiones de peligro.

Sin embargo el Choco se defendió con mucho orden. El Rápido tenía el balón pero no lograba llegar con peligro al área de Cortegoso, por lo que el choque se convirtió en un quiero y no puedo. Otero volvió a refrescar la parte ofensiva de su equipo, pero era incapaz de abrir huecos. El Choque esperaba y en el momento en el que recuperaban el balón salían con mucha velocidad para lograr un segundo tanto que sentenciara el partido. El Rápido no pudo salvar un punto, sumando su segunda derrota consecutiva tras caer primero con el Ribadeo.