El debut de Óscar Guimeráns en el banquillo del Portonovo no pudo tener más emoción, al salvar sus pupilos un punto en el tiempo de prolongación merced a un tanto de Buba. Pero entremedias vio cómo su equipo se quedaba con uno menos en el tramo final de la primera parte, con la expulsión de Manel, y luego cómo el Valladares remontaba el partido en el minuto 90 cuando también había sufrido otra expulsión. La fe que le ha insuflado el técnico a su equipo hizo que estos no bajaran los brazos ante una dura derrota que se repetía por tercera vez en los últimos partidos y aprovecharon el tiempo de prolongación haciendo el gol del empate.