La obra está a medio hacer, pero parece que representará un gran regalo de Navidad. El edificio que ocupó la sociedad recreativa del Mercantil en la calle del Príncipe y que ha sido adquirido por el Celta para convertirlo en su futura sede apareció este fin de semana cubierto con una gran lona blanca. Aunque desde el club nadie ha querido desvelar el secreto, todo indica que el Celta envolverá el inmueble como si fuese un gran regalo navideño, de Papá Noel o de Reyes.

Los trabajos de decoración del edificio, que continuarán en los próximos días, incluirán un gran lazo rojo. Será la aportación del Celta a una decoración navideña que contiene grandes elementos, como el árbol luminoso de la Porta do Sol o el Papá Noel que escala por la fachada del edificio de Abanca en el cruce de Colón con García Barbón.

El proyecto de remodelación de la futura sede del Celta está a la espera de la licencia municipal para ponerse en marcha. Mientras el club espera al inicio de las obras, obsequiará a la ciudad con un gran "regalo " navideño.