El Ceta B sumó un punto en Barreiro ante el Somozas que le permite seguir fuera de los puestos de descenso. El filial demostró durante los noventa minutos serios problemas para acercarse al área contraria y vivió de acciones puntuales de Borja Iglesias y de Luis Rioja. Además, en la recta final, los de Torres Gómez estuvieron a punto de irse de vacío porque un disparo visitante tocó en los dos palos de la meta defendida por Néstor Díaz, que también resultó decisivo al despejar un chut a quemarropa del Somozas.

Diego Alende, Borja Fernández y Pape, que estuvieron ayer en Balaídos en la victoria del primer equipo frente al Espanyol, jugaron como titulares. La primera parte apenas tuvo acercamientos. El Celta B apostó por tener el balón, aunque la posesión no se tradujo en ocasiones. El Somozas, por su parte, a punto estuvo de encontrar el premio sin buscarlo. Goldar estrelló en la escuadra de su propia portería un despeje.

En la segunda mitad más de lo mismo. El Celta B fue incapaz de jugar con profundidad y los visitantes lo aprovecharon para casi llevarse el gato al agua. Mario Barco se quedó mano a mano con Néstor Díaz. Su disparo cruzado superó al meta y se estrelló en la base del poste izquierdo, luego en el derecho y, para la sorpresa generalizada, el balón salió fuera en lugar de acabar en el fondo de la portería viguesa.

Este susto, sumado a la entrada de Guille Andrés, hicieron mejorar al filial que se lanzó a por el gol del triunfo. Pero finalmente quien volvió a tener la oportunidad más clara fue el Somozas, que probó los reflejos de Néstor a la salida de un córner.