El Barcelona tiene hoy en el Camp Nou el último obstáculo en la Liga antes de afrontar el Mundial de Clubes, con la llegada de un Deportivo, sexto en la Liga, que se encuentra en un momento de crecimiento, avalado por sus buenos resultados.
El Barça pierde a Neymar para este partido, lesionado en la previa del choque contra el Bayer Leverkusen, y podría recuperar a los lesionados Mathieu y Sergi Roberto, quienes han completado con satisfacción la última sesión de trabajo en la ciudad deportiva de Sant Joan Despí.
El Barcelona lleva dos partidos seguidos empatando (1-1, contra el Valencia y Bayer Leverkusen), que no le ha supuesto ningún problema en la Champions para acabar primero de grupo, pero que le ha restado margen como líder en la Liga, al dejarse dos puntos en Mestalla, tras un gol encajado en la recta final.
Por ello, Luis Enrique Martínez alertó ayer a los suyos para que pongan todos los sentidos y esfuerzo para firmar un triunfo que les dé alas antes del Mundial de Clubes, que afrontará el próximo jueves en Japón.
Acerca del estado de forma de Messi, todo apunta a que las supuestas molestias que podría haber sufrido el miércoles no le van a privar de regresar al once, que compartirá delante con Suárez.
La esperada recuperación de Sergi Roberto, tras unos partidos fuera el equipo, podría devolverle a la titularidad para dar descanso a otros mediocampistas que también acumulan muchos minutos.
La visita del Deportivo al Camp Nou despierta mucho respeto por el buen momento del equipo gallego, que ha sido capaz de firmar dos empates en las últimas tres visitas al Camp Nou.
El Deportivo regresa al campo en el que logró la permanencia en en la última jornada de la temporada pasada, el Camp Nou, esta vez sin presión e inmerso en una dinámica de resultados positivos, aunque con una baja importante, la del centrocampista Pedro Mosquera.
Casi siete meses después, el panorama es muy diferente para el Deportivo, que visita el Camp Nou instalado en la zona alta de la clasificación tras haber cedido solo dos derrotas.
Víctor tendrá que hacer al menos dos cambios en la alineación obligado por las bajas del centrocampista Pedro Mosquera, sancionado, y de Oriol Riera, que se lesionó ante el Sevilla (1-1) en Riazor.
