La precaria situación que atraviesa la defensa del Celta se vio ayer agravada por la lesión de Sergi Gómez, que no pudo concluir el suave entrenamiento matinal dispuesto ayer por Eduardo Berizzo por culpa de un problema muscular en el sóleo cuyo alcance está por determinar y que deja al equipo con solo cuatro zagueros específicos para afrontar el compromiso liguero de este sábado en el Benito Villamarín.

Sergi Gómez, a quien el técnico céltico dio descanso en la Copa por precaución debido a las molestias que arrastraba tras el partido contra el Sporting, sufre una probable rotura muscular en el sóleo (gemelo interno) de su pierna derecha, según informaron los servicios médicos del Celta. El jugador barcelonés será sometido hoy a una ecografía que permitirá evaluar con exactitud el alcance de la lesión, pero parece del todo improbable que esté en condiciones de vestirse de corto mañana ante el Betis. Incluso en el mejor de los escenarios, si el zaguero sufriese una simple sobrecarga muscular, parece difícil que el entrenador celeste se arriesgue a alinearlo ante la posibilidad de un agravamiento del problema.

La cuestión es que el entrenador del Celta tampoco va a poder disponer para el duelo ante los de Pepe Mel de Andreu Fontás, que se recupera de una tendosinovitis aquílea y cumple la primera de las cuatro semanas de recuperación pronosticadas por los médicos, lo que deja a Berizzo con un solo defensa central específico (el argentino Gustavo Cabral) y tres laterales (Mallo, Jonny y Planas) para armar el cuarteto defensivo que saltará mañana al césped de Heliópolis.

Lo más probable es que el preparador céltico vuelva a recurrir a Jonny Castro para acompañar a Cabral en el eje de la línea y sitúe a Mallo y a Planas en sus posiciones naturales en los costados, el marinense arrimado a la derecha y el catalán a la izquierda.

La opción de Jonny como central fue la elegida el miércoles por Berizzo para enfrentarse al Almería en el debut copero del Celta y ofreció buenas prestaciones al equipo. A pesar de no estar precisamente sobrado de centímetros, la posición de central no le es en absoluto desconocida al lateral matameño, que ha jugado habitualmente en el eje de la zaga en los últimos compromisos de la selección sub 21, de la que es asiduo.

El problema de contar con solo cuatro defensas es que el técnico se queda sin recursos en el banquillo para resolver cualquier contingencia que pudiese afectar a la zaga durante el choque. Y el serbio Nemanja Radoja, que era uno de los señalados por el técnico como alternativa, también está lesionado. Esto significa que Berizzo tendrá que volver a echar mano del filial para completar al banquillo. El central internacional sub 19 Diego Alende y los mediocentros Borja Fernández, a quien el técnico también ve con posibilidades en esta posición, y Pape Cheikh son los candidatos más firmes.