El Celta Baloncesto sumó la sexta derrota de la temporada, tras caer en Tenerife frente al Ciudad de los Adelantados. Una derrota que entraba dentro de lo previsto dada la enorme diferencia de plantilla existente entre ambos conjuntos.

Sin embargo, a pesar de la derrota, lo más destacado del encuentro fue el debut de Marta Canella, que después de muchas semanas en el dique seco ha vuelto a tener las sensaciones como jugadora, ayudando al equipo en un encuentro complicado como el de ayer.

La de Nigrán jugó catorce minutos, con dos canastas de tres intentos de dos y dos fallos en lanzamientos de triples, ayudando con dos rebotes, una recuperación y una falta cometida y otra recibida. Estos primeros minutos son la mejor medicina que podría recibir la base viguesa, que a partir de estos momentos deberá dosificar sus esfuerzos tanto en los entrenamientos como en los partidos, para que pueda seguir aportando al equipo y no quedarse en el dique seco.

En lo que al encuentro de ayer se refiere se desarrolló tal y como se esperaba. Las diferencias entre ambos conjuntos son abismales, ya que mientras el equipo vigués, sigue buscando una segunda extranjera que pueda ayudar al equipo, las canarias jugaron ayer con cinco extranjeras, entre ellas la excéltica Minata Keita.

A pesar de tanta diferencia, en los primeros diez minutos de juego el equipo de Cristina Cantero estuvo francamente bien, ajustando la defensa, sin permitir posiciones cómodas de tiro para las canarias y, al mismo tiempo, alcanzado ellas mismas buenos tiros, lo que les permitió finalizar los primeros diez minutos de juego a tan solo dos puntos de las canarias 18-16.

El segundo cuarta ya fue otra historia totalmente diferente. El Ciudad de los Adelantados ajustó la defensa impidiendo que las viguesas anotaran con facilidad. Además, comenzaron a correr haciendo rápidas transiciones que cogían fuera de posición a las viguesas. El parcial de 30-9 fue demoledor para las viguesas y para el encuentro, que quedaba prácticamente sentenciado al contar las canarias con 23 puntos de diferencia al descanso, 48-25.

En el vestuario, Cristina Cantero trató de hacerle ver al equipo que había que mejorar el juego para evitar recibir una abultadísima derrota, y las jugadoras tomaron buena nota volviendo a hacer un buen partido en defensa. Las canarias, mucho más relajadas, tenían problemas para anotar, consiguiendo en el cuarto solamente once puntos. El conjunto vigués tuvo un problema añadido, y fue el cansancio provocado por un juego rápido y veloz por parte del Ciudad de los Adelantados. Además, el dominio del rebote le permitía tener segundas opciones de tiro y sacar el balón con velocidad para salir a la contra y sorprender al equipo entrenado por Cristina Cantero.

Los últimos diez minutos de juego fueron un trámite para el Ciudad de los Adelantados, ya que la diferencia en el marcador era insalvable y, además, el equipo vigués estaba muy cansado, con lo que las canarias continuaron ampliando la ventaja en el marcador sin que el Celta Baloncesto fuera capaz de reaccionar para evitar una derrota más amplia.