El Atlético de Madrid aseguró su billete para los octavos de final de la Liga de Campeones desde los pases de Gabi Fernández y los goles de Antoine Griezmann, decisivos para un triunfo muy cómodo con el Galatasaray (2-0) y para el asalto al liderato del grupo C, aún pendiente de una victoria en Lisboa. En un ejercicio más incontestable de lo que dice el marcador del conjunto rojiblanco, dueño del encuentro de principio a fin, entre el capitán y el internacional galo desmontaron con sus goles a un flojo adversario. Gabi asistió, Griezmann remató y el Atlético ya está entre los dieciséis mejores de Europa por tercer año seguido.