"El marcador es durísimo", admite Jabato. "Tampoco hicimos el año pasado buen partido con ellos. Pero desde que estoy yo aquí es la derrota más dura, sin paliativos. Son justos vencedores".

El preparador local advierte fragilidades colectivas e individuales: "No nos han salido las cosas. Necesitamos que todo el mundo aporte. Si no, es imposible. Ha habido momentos en que hemos luchado, parecía que nos metíamos en el partido, pero es complicado. Llevamos muchos partidos en los que no estamos bien en ataque. Con la baja de Óscar lo estamos notando mucho. Por más que trabajamos seguimos teniendo los mismos errores. No logramos cambiar esa dinámica. Me voy muy triste y cabizbajo".

Establecido que la victoria del Bidasoa es justa, incluso en su aplastante rotundidad, el técnico muestra su amargura con la actuación arbitral: "El marcador está ahí. No hemos perdido por los árbitros. Pero ya hay muchas viejas batallas con estos árbitros. No me gustan absolutamente nada. Desde el club hay que intentar hacer todo lo posible para que estos árbitros no vengan más a pitarnos aquí", exige.

"Están pendientes de muchas otras cosas, de muchas tonterías, de mí... No están pendientes de otras acciones más serias", critica Jabato, que en cierto modo se esperaba algo así. "Ya los jugadores están prácticamente desquiciados. Cada vez que ven que estos árbitros están designados con nosotros hay que hacer incluso más terapia".