Celta y Val Miñor disputan mañana en A Madroa un derbi con tres puntos muy importante para ambos conjuntos. El filial necesita confirmar la mejoría iniciada hace cuatro jornadas, mientras que los de Nigrán quieren hacer bueno el empate logrado el pasado fin de semana ante uno de los equipos más fuertes, de momento, de la categoría, el Deportivo.
De lo que no cabe duda es que quien llegar con menos preocupaciones es el equipo que entrena David de Dios, pues los últimos cuatro encuentros se han saldado con victoria, aunque las últimas con muchos aprietos, pero al final ganaron que es de lo que se trata.
Todo lo contrario del Val Miñor, a quien el punto logrado el pasado fin de semana fue como una victoria en toda regla. Los jugadores entrenados por Álex Villar llevaban cuatro derrotas consecutivas, y había aparecido cierto nerviosismo.
Por lo tanto los dos equipos llegan a este derbi con la intención de hacerlo bién, aunque hablar de favoritos en un encuentro como este es muy complicado, ya que todos los jugadores se conocen, saben las virtudes y los defectos de los rivales. Partido extraño para Antón, que hasta el verano formaba parte de la plantilla y ahora llegará a A Madroa para disputar el encuentro desde el otro lado, por lo que puede ser una sensación extraña para el jugador
