El Celta conoce ya la identidad del árbitro que dirigirá el clásico gallego del próximo sábado en Riazor. Álvarez Izquierdo, adscrito al comité catalán, ha sido el elegido para impartir justicia el próximo sábado en el coliseo deportivista. Para los supersticiosos se podría decir que el colegiado catalán es "gafe" para el cuadro celeste, pues de los cinco encuentros que ha dirigido desde el retorno a Primera de los vigueses éstos sólo han arañado un punto en cinco partidos. Precisamente, este punto se produjo la pasada temporada en el feudo del Granada gracias a un gol de Bongonda en los últimos minutos de partido (1-1).

El balance de los otros encuentros es claramente negativo. La pasada temporada, Álvarez Izquierdo pitó la primera derrota del Celta de Berizzo en Liga, un tropiezo que se produjo ante el Villarreal en Balaídos y en el que acabó expulsado Fontás (1-3).

En la etapa de Luis Enrique, los celestes también sucumbieron los dos partidos que dirigió el colegiado catalán (0-1 ante el Levante y 3-0 frente al Real Madrid), mientras que en la era de Paco Herrera se recuerda la derrota sufrida en Vallecas cuando los vigueses superaban por cero tantos a dos al Rayo. La remontada franjirroja se produjo gracias a la discutida y tempranera expulsión de un Gustavo Cabral que aquella cita jugaba como pivote defensivo (3-2).

En la campaña del último descenso del Celta (2006/07), los vigueses se cruzaron en dos ocasiones con Álvarez Izquierdo. En ambos partidos acabaron perdiendo (1-2 ante Sevilla y 1-0 frente al Valencia).

En la etapa reciente del conjunto vigués sólo se recuerda una alegría con Álvarez Izquierdo. Pero no se produjo en Liga, sino en Copa del Rey. El Celta doblegaba en Balaídos al Real Madrid con goles de Mario Bermejo y Cristian Bustos (2-1). No obstante, el colegiado catalán perdonó aquella noche la expulsión de un Cristiano Ronaldo que acabó desquiciado por el espectacular marcaje de Hugo Mallo.

Al Deportivo le han ido algo mejor las cosas con el colegiado catalán, que tampoco ha sido una pera en dulce para los herculinos, especialmente lejos de su feudo de Riazor, donde nunca han ganado en las nueve ocasiones en las que Álvarez Izquierdo les ha dirigido un partido. Tampoco en casa les han ido demasiado bien con este colegiado, con el que el Deportivo ha sumado en su campo cuatro derrotas y tres victorias.