El Rápido de Bouzas sumó ayer un punto que le permite, por un lado, mantener la seguna posición en la clasificación empatado a puntos con el líder, y por otro seguir invicto en el Baltasar Pujales de Bouzas.

El partido no fue brillante, ya que los dos equipos se repetaron demasiado. Nadie quiería arriesgar demasiado no fuera a verse sorprendido por el rival y después le costada demasiado remontar. Aún así, en los primeros minutos de juego parecía que era el Rápido quien se encontraba más cómodo sobre el terreno de juego. Misa, con los galones, ordenaba el juego ofensivo de los boucenses, a los que le faltaba culminar la jugada para crear peligro ante la meta de Reguero. El Boiro se encomendaba a las llegadas de Rubén Rivera, pero Sergio Ríos casi no tuvo trabajo.

Sin embargo la desgracia llegó para el portero boucense pasada la media hora de juego, cuando una indecisión en una salida le dejó el balón a Rubén Rivera que no falló adelantando al Boiro en el marcador. El Rápido no modificó su sistema de juego, y cinco minutos más tarde lograda igualar el encuentro por mediación de Tomás. Gabi Misa, omnipresente en todos los lados, sacó un córner que Tomás remató perfectamente fuera del alcance de Reguero. Un go que hacía justicia a lo que había sucedido sobre el terreno de juego.

En la segunda mitad la polémica llegó en el tiempo de descuento, cuando un defensor del Boiro derribó dentro del área a Iago Paz, ordenando el colegiado del encuentro que continuara el juego. Las protestas fueron unanimes, pero el árbitro no pitó el penalti.