El lateral portugués del Deportivo Luis Carlos Correia, 'Luisinho',pasa página sobre su enfrentamiento con el central Alejandro Arribas en el entrenamiento del día 15 y aseguró tras reincorporarse al grupo, que la situación se ha reconducido en la plantilla, a la que ha pedido perdón.

"Hablamos hoy -por ayer- porque el tema estaba muy caliente en los otros días. Resolvimos las cosas, se pidió perdón y que no queden dudas. En el vestuario no hay nada contra mí, ni mío contra el vestuario. Si lo hubiese, no estaría aquí", comentó el lateral portugués, a quien el club le impuso una sanción económica y cuatro días de suspensión de empleo.

Luisinho, que ya había protagonizado otros incidentes en el césped, desmintió que "dentro del vestuario" se hubieran producido enfrentamientos tanto ahora como en el pasado.

"Que no haya dudas sobre eso porque no es bueno para mí ni para nadie", sostuvo el futbolista, que la semana pasada ya había pedido disculpas públicamente a través de un comunicado.

Ese texto recibió después la respuesta de la plantilla, en boca del capitán, Manuel Pablo García, con la lectura de otro comunicado en el que se acusaba al luso de "faltas graves a compañeros y técnicos".

"Creo que todos nos equivocamos. Yo me equivoqué. Y después está ese comunicado que quisieron hacer y que respeto. Hay que seguir adelante, estamos todos en el mismo barco y quiero volver a ser el Luisinho que era antes. No veo diferencias entre yo y la plantilla", insistió.

El portugués asume su cuota de "culpa", pero insistió en que "no solo" él se equivocó, que hubo "mucha gente" que "se precipitó".

"Ahora hay que seguir, estoy aquí, soy uno más, queremos un grupo unido, no es bonito que pase esto tanto para el fútbol como para el Deportivo, que es un club serio, y creo que todos estamos arrepentidos de lo que pasó y queremos que vuelva a la normalidad. Por mi parte va a volver a la normalidad y por la del club, también", anunció.

Luisinho explicó que habló con Alejandro Arribas y con el grupo y afirmó que aunque él tiene su "carácter, como todo el mundo sabe, eso no implica que no tenga buena relación" con los compañeros.

También ha intentado reconducir la relación con el entrenador, quien hace una semana, en una rueda de prensa dos días después del enfrentamiento, afirmó que se había tratado de mucho más que un "rifirrafe". "La relación con el entrenador está bien. Ya hablamos, pusimos las ideas en práctica, fuimos sinceros uno con el otro y hay que seguir adelante porque fue un tema que me perjudicó a mí y no quiero volver a pasar por esto porque el que lo pasó mal fui yo. Hablé con él y está todo claro entre los dos", dijo.