Dejan Drazic se ha convertido en la cuarta incorporación veraniega del Celta tras las de Wass, Aspas y Guidetti. El joven futbolista serbio, que cumple 20 años el próximo mes de septiembre, se ha comprometido con el club vigués -a expensas de que supere el examen médico que se le realizará en Vigo- por las próximas cinco temporadas en una operación muy similar a la que el club abordó hace un año con Nemanja Radoja. Buscar un joven talento balcánico y habitual de las categorías inferiores de la selección serbia en un movimiento que económicamente no suponga un gran riesgo para el club.

Drazic es la primera de las dos incorporaciones ofensivas que el Celta esperaba realizar antes de finalizar el mercado veraniego tras aparcar la contratación del central. El futbolista, que llega procedente del OFK Belgrado a cambio de una cifra que podría estar por encima del medio millón de euros, es el jugador habilidoso capaz de moverse por todo el frente del ataque del que Berizzo había hablado en rueda de prensa el jueves. Drazic es un futbolista diestro, rápido, de indudable habilidad que suele ocupar la zona izquierda del ataque, pero con capacidad para adaptarse a otras situaciones.Se trata de un jugador al que le gusta explotar su calidad individual, regateador, con un buen uno contra uno y en quien el club tiene depositada una evidente confianza como lo demuestra, entre otras cosas, que le hayan puesto una cláusula de rescisión de 30 millones de euros, la más alta hasta la fecha que el Celta ha estampado en el contrato de uno de sus futbolistas. Los tiempos de las cláusulas extremadamente bajas parece que empiezan a diluirse en Vigo.

El serbio, formado en la prolífica cantera del Partizán, es uno de los representantes de las brillantes generaciones serbias nacidas en 1994/95 y que entre otras cosas le dieron a su país hace mes y medio el Mundial sub-20 tras vencer en la final a Brasil. El nuevo jugador del Celta se perdió esa cita finalmente pese a haber formado parte de la preselección de Paunovic.

Pese a su corta edad, Drazic ya conoce con suficiencia el fútbol profesional. Acumula 57 partidos con el OFK Belgrado (52 en Liga y 5 en Copa) y 9 goles desde que debutase con ellos en septiembre de 2013. El futbolista llegará al Celta con un punto de rodaje importante porque ya ha disputado tres encuentros de Liga (en los tres ha disputado los noventa minutos) y en ellos ha marcado un gol y dado una asistencia. Su protagonismo en el campeonato serbio era cada vez más evidente. Drazic también ha destacado por su fuerte personalidad y carácter como buen exponente de la escuela a la que pertenece.

Tras la llegada del serbio el Celta aumenta, como era la intención de Berizzo, la competencia en el ataque a falta de que aterrice el futbolista de banda que en teoría debería ocupar el espacio que ha quedado libre con la venta de Santi Mina al Valencia. Al mismo tiempo se dispara la juventud de una plantilla que en determinadas posiciones puede adolecer de un exceso de bisoñez en un campeonato tan duro y exigente como el español.

Se espera que Drazic llegue a Vigo este mismo fin de semana para pasar el examen médico e incorporarse de inmediato al grupo de Berizzo con la idea de encarar la preparación de las dos últimas semanas antes del comienzo de Liga que para el Celta está previsto el próximo 23 de agosto a las 22:30 horas en el Ciudad de Valencia contra el Levante.