El entrenador del Celta, David de Dios, reconoció que "sabíamos lo que teníamos que hacer y como iba a ser el partido. Nuestro objetivo era llegar al minuto setenta y cinco con uno a cero, al final planteamos el partido para el dos a cero, si hubiéramos llegado a los diez minutos finales con el uno a cero nos hubiéramos llevado la eliminatoria. Eso es lo que tiene el Rayo, lo errores con la gente de arriba tan rápida que tienen arriba te matan, pues tuvieron dos ocasiones. Sabíamos como seria el partido y teníamos que estar muy atentos en facetas defensivas para pasar. El partido de ida, sin tener nosotros tantas ocasiones, fue muy similar. Cuando estaba controlado el partido en dos acciones a balón parado te meten los goles".

Sobre el tanto del empate, dijo que "llega un momento en el que tienes que arriesgar. Si el uno a cero nos vale sería otra cosa, pero no te valía. El reloj corría y necesitábamos arriesgar un poco más y al final, una pérdida en tres cuartos, que normalmente no pasa nada y el mundo del fútbol hay cientos de ellos. Un balón largo, una duda del portero, central, y en el momento en el que dudas ahí están ellos". Sobre las ausencia, reconoció que "efectivamente las notamos, no porque fuera Brais y Pape, sino porque nos faltó fútbol y ellos lo tienen".

Sobre el balance que hizo de la temporada, el técnico afirmó que "estoy contento con lo que fue la temporada. Lástima de dos goles más y estaríamos en la final y pena de la Copa de Campeones. No le daría un nueve, ya que el comienzo fue irregular y mucha gente dudó de nosotros pero un notable alto lo merecemos".

A la hora de hablar sobre su futuro, David de Dios dijo que "yo ni mando ni decido. Mi casa está aquí, mis amigos, están aquí, mi gente está aquí y siempre que el Celta me quiera me va a tener. Esperaré por el Celta lo que haga falta".