Contra todo pronóstico, el Real Zaragoza consiguió una remontada histórica a domicilio y se impuso por 1-4 al Girona, que no hizo valer el 0-3 en la ida, por lo que se jugará ante la UD Las Palmas (miércoles y domingo) el ascenso a Primera División.

Los locales, que estuvieron a un par de minutos de subir directamente a Primera pero empataron en la última jornada en casa frente al Lugo, han firmado un final de temporada para olvidar, pese a la intensidad que le pusieron en la primera mitad.

El Zaragoza tuvo la posesión del balón desde el principio y también las primeras oportunidades de gol. El 0-1 llegó tras un penalti por manos de Mata que transformó Willian José en el minuto 17. Pese al tanto el Girona siguió creyendo en el partido y tuvo una buena oportunidad por medio de Aday.

Las idas y venidas a las dos áreas se transformaron en un gol anulado a Mata y en un remate de Cabrera que sacó el excéltico Richy bajo palos. En el 34 llegó el 0-2. De nuevo, Willian José enmudeció Montilivi con un cabezazo cruzado, en el que nada pudo hacer Becerra.

Este gol lo sintió mucho el Girona, que perdió el rumbo del partido en el cuarto de hora final y al borde del descanso Cabrera remató el 0-3 con lo que se equilibraba la eliminatoria.

El segundo tiempo se inició con dinámicas muy opuestas en cuanto a la moral. Machín introdujo un cambio en el descanso para intentar cambiar la dinámica.

En los primeros compases, el partido se igualó y la primera ocasión no llegó hasta el minuto 55 en un remate de Pedro desde el interior del área que Becerra atajó.

Para el Girona, la tuvo Mata en un rechace, pero Bono consiguió desviar. El partido entró en una fase en la que parecía que ambos equipos tenían más miedo a perder que a ganar. Sandaza para el Girona intentó lo imposible con un chut desde el centro del campo que Bono blocó con seguridad.

El Zaragoza casi sentenció la eliminatoria con el cuarto, obra de Pedro, que remató un buen centro de Rico por la izquierda.

El Girona, que necesitaba dos goles, lo intentaba a la desesperada, primero Sandaza falló, pero en la siguiente jugada Aday puso la bota para superar a Bono y poner emoción en la eliminatoria.

Los locales apretaron los dientes y Pere Pons perdonó en una situación inmejorable. El asedio del Girona era constante, pero los minutos pasaban.

La tensión era evidente en Montilivi. Sin embargo, el Zaragoza aguantaba las embestidas locales. Jugarán los maños por el ascenso y los locales, que firmaron una gran temporada, no la han podido rubricar como esperaban.