El Celta recibe esta noche al Real Madrid (Balaídos, 21.00 horas, Canal+) decidido a convertirse en juez de la Liga con un triunfo que reafirme sus opciones de conquistar la séptima plaza que puede conducir a Europa la próxima temporada. Se enfrenta el cuadro celeste a la colección de estrellas que dirige Carlo Ancelotti liberado de ataduras tras conseguir con seis semanas de antelación el objetivo de la permanencia y dispuesto a plantar cara al vigente campeón europeo en una semana clave para sus aspiraciones en la que, tras medirse hoy a los blancos, recibe el miércoles al Málaga y visita el lunes siguiente al Almería en el estadio Juegos Mediterráneos.

Nada que perder y mucho que ganar tiene, por consiguiente, el conjunto de Berizzo frente a un oponente que multiplica por dieciséis su presupuesto y que se juega en Vigo la Liga. A pesar de contar con bajas significativas -Karim Benzema, Gareth Bale y Luka Modric no han viajado a la ciudad por lesión-, el Real Madrid es plenamente consciente de que el título pasa por Balaídos y comparece en el estadio vigués con el ánimo enaltecido tras eliminar el pasado miércoles al Atlético de Madrid en los cuartos de final de la Liga de Campeones.

No necesitó Ancelotti de todo su arsenal para quitarse de en medio al enérgico conjunto de Simeone y, si la lógica del dinero se impone, debería bastarle con lo puesto para asaltar esta noche Balaídos. Claro que la lógica del fútbol no siempre favorece al poderoso y el Celta, que ya truncó hace un año con Luis Enrique las esperanzas blancas de ganar la Liga, ha ofrecido este curso con Berizzo sólidos argumentos para hacerse respetar.

El solvente rendimiento ofrecido esta temporada ante los grandes equipos del campeonato -el Celta ha restado ya dos puntos al Valencia, cuatro al Atlético y tres al Barcelona, al que doblegó en el Camp Nou y puso en problemas en Balaídos- es todo un aviso a navegantes para el conjunto blanco que, con el triunfo azulgrana de ayer en el derbi catalán, no puede permitirse ya el menor tropiezo.

La victoria en inferioridad del Barcelona en el campo del Espanyol añade a los blancos un punto de presión que el Celta tratará de aprovechar esta noche. Pero sobre todo, el conjunto de Berizzo se ha propuesto plantar cara el Madrid sin complejos, siendo fiel al estilo arrojado que lo ha distinguido como referente del juego ofensivo en el campeonato español.

Con estas premisas, el preparador celeste desplegará ante los blancos un once muy similar al que doblegó consecutivamente al Rayo Vallecano y al Eibar. La única duda es si Berizzo mantendrá en la alineación al joven Santi Mina en banda derecha o echará mano de Pablo Hernández como enganche, desplazando a Fabián Orellana al costado. Berizzo desplegará, en todo caso, una línea de cuatro defensas (Mallo, Cabral Fontás y Jonny) por delante de Sergio y formará con Krohn-Dehli y Augusto Fernández en el doble pivote, Nolito arrimado al flanco izquierdo y Larrivey como punta de lanza.

La presencia de Hernández, a quien Berizzo ha utilizado en todos compromisos ante los grandes con buenas prestaciones, dotaría al ataque celeste de mayor presencia física e incrementaría notablemente su potencial en el juego aéreo, aunque le restaría velocidad y frescura. Rubén Blanco, Sergi Gómez, Álex López, Theo Bongonda, Charles y Madinda completan la convocatoria celeste, de la que se ha caído a última hora Radoja, que no ha superado sus molestias en el pubis.

Tras derrotar con bajas importantes en la Liga de Campeones a su bestia negra, Ancelotti estudia algunos cambios en el once con respecto al que doblegó al Atlético. El italiano recupera al brasileño Marcelo, respecto al encuentro de Liga de Campeones, pero sigue sin poder contar con Bale, Benzema y Modric.

Las novedades en el equipo titular de Ancelotti podrían llegar en los laterales, con la entrada de Álvaro Arbeloa en el derecho y la vuelta de Marcelo al izquierdo, más la presencia de Asier Illarramendi en el centro del campo tras quedar señalado en Liga de Campeones con el experimento Sergio Ramos, que regresará en Balaídos al centro de la defensa. Ronaldo y James jugarán en banda, Isco se perfila como enganche y el mexicano "Chicharito" Hernández, héroe de la eliminatoria ante los colchoneros, repetirá en punta.