Iker Casillas tiene cuerda para rato, no se plantea la retirada a los 33 años y con 159 partidos internacionales encima. "Hasta que el seleccionador quiera y yo pueda seguir jugando, seguiré viniendo a la selección. Pero para eso necesito tener un hueco en mi equipo porque es el trampolín para llegar hasta aquí", dijo ayer el capitán de La Roja y del Real Madrid, que trató de enfríar la polémica de los últimos días sobre la ausencia de Cesc y de Diego Costas por problemas físicos. "El compromiso que tenemos los jugadores que estamos aquí es máximo y estoy convencido de que el de los jugadores que no han venido también es total. Creo que no hay que darle más vueltas a esto ni hablar del compromiso o no de un jugador", dijo al ser cuestionado sobre las declaraciones de Ramos cuestionando el compromiso de los futbolistas del Chelsea.

El capitán también tuvo que dar su opinión sobre el futbolista español de moda en los últimos días, Isco Alarcón: "Estamos hablando de un jugador sensacional que está demostrando muchas cosas en lo futbolístico. Tengo la suerte de saber que es un chaval con la cabeza muy bien amueblada y que los elogios, en ese sentido, los lleva con mucha calma. Estoy convencido de que va a dar muchas alegrías al fútbol español".

Casillas, al igual que Busquets, no quiso valorar la noticia de El País sobre la investigación de Hacienda a varios jugadores de la selección. "No es un tema deportivo", dijo Casillas pese a la insistencia de un periodista, a quien la jefa de prensa de la seleción le recriminó por plantear dicha pregunta.

Sobre el rival de hoy, Casillas apuntó: "Hemos visto que en la fase de clasificación ha tenido partidos complicados y se ha dejado algunos puntos, pero no deja de ser la actual campeona del Mundo. Alemania siempre va a dar el máximo nivel, puede que sea algo temporal porque tiene grandes jugadores de nivel mundial". Y destacó a Muller: "Tiene algo que me recuerda a Raúl, es un jugador diferente y siempre está ahí".