El Bayern de Múnich firmó una de las mejores goleadas de su historia tras imponerse a la Roma (1-7) en una primera parte primorosa, con fútbol de quilates y goles de bandera, lo que permitió al Manchester City seguir con vida dentro del grupo E después de empatar (2-2) en su visita al CSKA Moscú.

El conjunto de Pep Guardiola ofreció un auténtico recital en el Olímpico, en un partido que recordó al 'Mineirazo' de Alemania a Brasil en el pasado Mundial. A los 36 minutos, el conjunto germano vencía por 0-5 y los italianos apenas podían levantar su orgullo, mancillados por la máquina de fútbol muniquesa.

Robben consiguió el primer tanto a los nueve minutos y abrió el camino a Gotze, que enhebró el segundo antes del minuto 25. Lewandowski, Robben y Muller antes del descanso confirmaban la humillación. En la segunda mitad, el equipo romano pudo hacer el gol del honor con un lanzamiento de Gervinho, que no sirvió para nada más porque el Bayern decidió aumentar la cuenta hasta siete. Sin compasión, Ribery y Shaqiri hicieron los goles para dejar a los alemanes liderando con autoridad el grupo E en lo que fue una exhibición táctica de Pep Guardiola. A quién sí le valió este triunfo fue al Manchester City, que desperdició la oportunidad de ganar en Moscú (2-2) después de haberse adelantado (0-2) en la primera mitad gracias al inspirado 'Kun' Agüero y al inglés James Milner.

Por su parte, en el grupo G, el Chelsea también goleó al Maribor (6-0) en un plácido partido para los de José Mourinho, que solo dejaron alguna duda en los compases iniciales. Destacaron los goles de los veteranos Terry y Drogba, así como la actuación de Hazard, autor de un doblete. Además, los eslovenos fallaron un penalti. Así, el cuadro inglés se convierte en líder, pero con sólo dos puntos de ventaja sobre el Schalke.