La cantera de A Madroa ha generado alrededor de 17 millones de euros de beneficios en el último lustro. El Celta ha encontrado un filón en su cantera para superar la grave crisis económica que le llevó a someterse a un proceso concursal al acumular una deuda próxima a los 85 millones de euros. Rodrigo Moreno abrió la puerta por la que más tarde saldrían otras promesas, como Joselu Sanmartín y Denis Suárez, o futbolistas consolidados, como Jordi Figueras, Iago Aspas y Yoel Rodríguez. El guardameta vigués ha sido el último en emigrar. El jueves firmó su nuevo contrato con el Valencia, que tendrá que desembolsar 2 millones de euros al conjunto gallego.
El Celta ha logrado importantes beneficios con su cantera desde que el club apostó por nutrir al primer equipo de jóvenes valores. A Madroa se convirtió en la principal fuente de recursos de la plantilla que durante un lustro peleó por devolver al equipo a la máxima categoría. Aparte de esos beneficios deportivos, los jugadores del Celta aumentaron su cotización en el mercado de fichajes.
La mayor operación realizada en el último lustro por el Celta se concretó el verano pasado con el traspaso de Iago Aspas al Liverpool. El club inglés pagó 9 millones de euros por el delantero de Moaña, que el curso que viene jugará cedido en el Sevilla, que se reserva una opción de compra de la que también sacará tajada el Celta por los derechos de formación.
En esta lista de traspasos recientes, Joselu Sanmartín ocupa la segunda posición. El delantero llamó la atención del Real Madrid, que abonó 1,5 millones de euros. Su venta posterior al Hoffenheim alemán reportó otro millón más a las arcas celestes por un jugador de 19 años que Eusebio Sacristán llevó al primer equipo cuando rozaba la mayoría de edad.
Tras la marcha de Joselu, el fútbol inglés también echó las redes en Vigo y el Manchester City se llevó a una de las grandes promesas de la cantera celeste. Denis Suárez se marchó en 2011 a cambio de un millón de euros.
Por ese traspaso se lamenta todavía el presidente Carlos Mouriño, pues el jugador partió a Inglaterra sin estrenarse con el primer equipo. La situación económica obligaba a vender.
El verano pasado, el Barcelona fichó a Denis por 1,8 millones de euros para su filial. La próxima temporada debutará en Primera con el Sevilla, al que ha llegado cedido en la operación del traspaso de Rakitic al Camp Nou.
En febrero de 2010, el catalán Jordi Figueras también abandonó Vigo para firmar por el Rubin Kazan, que desembolsó 850.000 euros por el defensa que había llegado al Celta desde la cantera del Real Madrid. En este caso, el club gallego rentabilizaba las gestiones de su secretaría técnica, pues Figueras fue contratado para el filial y acabó en el primer equipo.
Después llegarían los traspasos de Aspas y de Yoel, con los que el Celta ha ingresado 11 millones de euros. El delantero y el guardameta se formaron en A Madroa, que se ha convertido en una fábrica muy rentable para el Celta.
Al dinero recibido por los traspasos citados hay que añadir los dividendos acumulados por los derechos de formación en posteriores cambios de clubes de quienes en su momento pertenecieron al conjunto vigués en su etapa de formación, como David Silva y Diego Costa. Así, el reciente traspaso del goleador del Atlético de Madrid al Chelsea supone 200.000 euros para el Celta por esa "contribución de solidaridad" que exige la UEFA en cada traspaso a favor de los equipos por los que pasó el futbolista entre los 12 y los 23 años de edad. Costa jugó un año en Balaídos, cedido por el conjunto rojiblanco, por lo que le corresponde el 0,5 por ciento de los 40 millones de euros que pagó el equipo londinense.
Lo mismo ha ocurrido con Michu y con Oriol Riera, dos futbolistas que firmaron por el filial céltico, debutaron con el primer equipo y se marcharon con la carta de libertad. Este verano, Michu ha cambiado el Swansea por el Nápoles y Riera Osasuna por el Wigan Athletic. En Plaza de España calculan que por estas operaciones les corresponden alrededor de 150.000 euros.
Del equipo que logró el último ascenso a Primera División solamente quedan cinco futbolistas en la actual plantilla del Celta, a la que siguen llegando canteranos. Siete se llevó Berizzo a la gira por Inglaterra. Algunos como Rubén Blanco y Santi Mina ya cuentan con muchos pretendientes desde hace tiempo. A Madroa seguirá dando buenos dividendos.
