Una de las señas de identidad del Rallye Rías Baixas es su afición, una afición que se multiplica año tras año. La organización estima que cerca de 60.000 personas asistieron a algún punto de los tramos, Destaca el buen comportamiento de los aficionados, salvo la excepción de un joven que fue detenido el viernes tras encararse con agentes de la Policía Local. Los agentes reprendieron a un hombre por cruzar la zona de meta en O Freixo y su hijo salió en su defensa encarándose con los policías por lo que fue detenido. El padre fue multado por cruzar por zona no permitida.