Sergio Ramos aseguró ayer, tras marcar dos goles al Bayern de Múnich que adornaron el 0-4 del conjunto blanco en el Allianz Arena, que la Champions le debía "una" ante el conjunto alemán, ante el que vivió malos momentos cuando hace dos temporadas falló uno de los penaltis de la tanda de la vuelta de las semifinales. "Los goles son lo de menos. Lo gratificante es el trabajo colectivo. Ha sido un resultado muy justo, un golpe muy fuerte para el campeón y el Madrid esta donde debe estar a nivel mundial", declaró.