El Coruxo sumó un empate con sabor a victoria en su desplazamiento a Guijuelo. El cuadro vigués continúa anclado en la posición de promoción con 36 puntos, aunque con un partido menos que el equipo que le precede en la tabla, la Sociedad Deportiva Logroñés, que ahora se encuentra a dos puntos. Los de Rafa Sáez fueron de menos a más en el partido y, tras cuajar una mala primera parte, despertaron en la segunda. Centrón fue el autor del gol del empate a falta de diez minutos para la conclusión, un gol que puede valer su peso en oro a final de temporada y que saca a los chacineros de los puestos de play off.

La primera parte tuvo un poco de todo. El Coruxo quiso el balón, pero el Guijuelo no le permitió tenerlo. A través de la posesión llegaron las mejores oportunidades del partido, casi siempre del lado chacinero. El Guijuelo se mostró como un equipo frenético desde los primeros compases. Su puesta en escena fue eléctrica. Un disparo lejano de Chuchi fue el primer aviso serio de los locales, que lo intentaron desde fuera del área porque el Coruxo cerró todas las vías de ataque por el centro y por las bandas tampoco acababan de encontrarse cómodos los salmantinos. La respuesta del Coruxo corrió a cargo de Vázquez tras un excelente centro de Cifuentes, que apuró hasta la línea de fondo para colgar el esférico al corazón del área. Esa jugada no metió el miedo en el cuerpo al Guijuelo, que siguió insistiendo en los minutos siguientes y rozó el gol en el minuto 10 en una combinación entre Chuchi y Pino que acabó con un disparo del delantero. Aitor Aspas sacó el balón en la misma raya de gol cuando el tanto ya se cantaba en las gradas del Municipal chacinero.

Hasta la media hora de juego el encuentro se convirtió en un correcalles sin medida. El Coruxo tuvo alguna acción aislada para hacer daño, pero anduvo peleado con el remate. Se equivocó volcándose al ataque cuando la situación lo desaconsejaba. El Guijuelo castigó esa actitud valiente. Lo hizo a través de Peña, que mandó un balón al lateral de la red, primero, y posteriormente dio en el blanco. Pino le habilitó con un preciso centro y solo tuvo que regatear a Fernando en velocidad para establecer el 1-0 en el marcador. El tanto dejó en estado de shock al Coruxo, que a punto estuvo de encajar un segundo gol minutos después.

El tramo final de la primera parte fue un querer y no poder del Coruxo, que se hizo con el control del centro del campo pero careció de profundidad. El Guijuelo, cansado por el esfuerzo realizado con anterioridad, se encerró en su madriguera y le impidió progresar.

Muy diferente fue la segunda parte. El Coruxo se lo fue creyendo poco a poco y empezó a dominar el centro del campo. Aparecieron entonces los futbolistas de calidad y se veía venir el empate. Si no llegó antes fue por la falta de puntería de los visitantes. El gol terminó llegando a diez minutos del final cuando Reguero superaba con una vaselina a Wilfred y Centrón cabeceaba sobre la línea. En la jugada Reguero fue arrollado y quedó tendido en el suelo sin moverse. Después de sufrir vómitos y convulsiones apareció la ambulancia.

El Guijuelo quiso recuperarse y lo consiguió. Tuvo tiempo para generar dos clarísimas ocasiones de gol en el pie izquierdo de Chuchi. Primero una falta que rozó el palo y después un disparo que se marchó al mismo lugar. Finalmente no hubo tiempo y el mazazo es tremendo para los locales, que caen de los cuatro primeros a falta de tres partidos.

A última hora de la tarde de ayer, Reguero recibía el alta hospitalaria después de que las pruebas realizadas fueran satisfactorias. No obstante, el jugador vigués regresa con varios puntos de sutura y un collarín. El viaje de vuelta lo hizo en el vehículo del vicepresidente Manuel Falqué, quien lo acompañó durante su estancia en el hospital, junto con su compañero Pazó.