La victoria en Almería, pese a la aparente solvencia que refleja el marcador, le costó al Celta mucho esfuerzo y bastantes golpes. De hecho, Álex recibió uno en el sóleo de la pierna izquierda. Es justo la zona en la que estuvo lesionado. El ferrolano había estado de baja durante dos semanas por culpa de una microrrotura. En previsión de males mayores, Luis Enrique decidió sustituirlo en el descanso, dando entrada a Madinda, que cuajó una buena actuación.

También Rafinha, que lleva varias semanas renqueante por diferentes molestias, fue sustituido en el minuto 75, justo después de asistir a Nolito en el 1-4. El joven se fue cojeando, aunque no parece nada importante. Hugo Mallo, por su parte, completó el partido pese a recibir un fuerte golpe en la nariz, en un cabezazo con Rodri, que le obligó a llevar un apósito.