El fútbol base es una de las apuestas del Celta que preside Carlos Mouriño. Su proyecto se ha sustentado en la cantera. Esa apuesta ha valido para devolver al conjunto vigués a Primera División y, en estos momentos, a intentar consolidarse en la máxima categoría. La factoría de A Madroa trabaja a pleno rendimiento. Cada hornada produce gente de calidad para el primer equipo. Desde Iago Aspas o Roberto Lago hasta Hugo Mallo o Santi Mina. Prácticamente un lustro de diferencia, dos generaciones que, además, han tenido protagonismo en las categorías inferiores de la selección española.

La progresión de A Madroa está llamada a trasladarse al equipo que ahora dirige Luis Enrique. En las últimas horas la cantera ha vuelto a deparar dos buenas noticias. España sub´19 goleaba a Sergio con un claro protagonismo de "productos" célticos. Rubén Blanco, David Costas, Yelko Pino y Santi Mina -un jugador por línea- conformaban la formación inicial de un combinado nacional que a partir del 30 de mayo disputará el Balaídos el Minitorneo Élite UEFA sub´19. En ese equipo, además de estos cuatro canteranos, podría haber otro jugador formado en A Madroa como el centrocampista Borja Fernández.

La proyección de la "generación del 95" es indudable. Lo demostraron hace casi un año en la Copa de Campeones Juvenil disputada en Vigo. Sin embargo, el futuro de la cantera todavía es más prometedor. El Celta Cadete B regresará en las próximas horas a la ciudad olivica tras cuajar una buena actuación en un torneo disputado en Qatar. Los celestes no comenzaron bien la competición, pero acabaron su participación en el "LFP Aspire Challenge" en quinta posición tras imponerse en la "final bronce" al Sporting de Gijón por un contundente cinco a uno.

En los próximos días también habrá que estar atentos a la participación del conjunto vigués en la Copa del Rey de Juveniles. El Celta, que finalizó segundo, acude a la competición del KO con jugadores prometedores como Brais Méndez, Iván Villar, Samu o Fede Varela.