El Academia Octavio está obligado a rearmarse de nuevo. La baja de su extremo Javier Barba "Javito" por lo que resta de temporada es otro episodio de la amarga cruz que porta el equipo académico esta temporada.

Imposible vaciar la enfermería. La rotura de ligamentos de Javito en el desplazamiento a Benidorm ha sentado como un mazazo en el seno del equipo vigués que, sin embargo, ha trabajado duro durante la semana para asimilar el mazazo de perder a su extremo hasta final de curso. No hay tiempo para lamentaciones porque hoy toca derbi. Ante el Teucro no hay excusas. Imposible perder para seguir soñando con la posibilidad del ascenso. "Creo que hemos asimilado la lesión de "Javito", que fue la última mala noticia que tuvimos. Hemos entrenado bien y estamos con buen ánimo y con ganas de poder brindarle a él también una victoria", indica el entrenador del cuadro académico.

Domínguez confía que esta nueva lesión no sea el inicio de otra mala racha del equipo: "Confío que no volvamos a vivir otro bache. Veo al equipo mentalizado y preparado para luchar mucho en este último tramo de la liga, empezando por el partido de mañana (por hoy)". "Además, queremos dejar atrás la derrota de Benirdorm y seguir en la buena línea que llevaba el equipo", prosigue.

En su visita a Altea, el cuadro vigués puso fin a una racha de cuatro jornadas sin perder, con un empate y tres victorias consecutivas. Pero ante el Benidorm cayeron por 27-24. El balance de daños fue mayor que el de la derrota, ya que ahí mismo "Javito" se despedía de la temporada.

Con esta derrota, además, el conjunto académico caía a la séptima posición, con 29 puntos, tres más de los que tiene el Teucro, que es noveno con 26.

El Octavio buscará, sin embargo, hoy una victoria para poder brindarle a su extremo. Pero Quique Domínguez advierte de la dificultad que entraña siempre un derbi. "Son partidos con una emotividad mayor, con mucha igualdad porque vendrá gente de Pontevedra a animar al Teucro, que por otro lado está también en una situación un poco delicada y que seguro que vendrá a ponernos las cosas difíciles". Confía el entrenador que el factor campo sea decisivo, y que prime "el hecho de que estemos por delante en la clasificación y que estemos en una racha un poco mejor que la de ellos".

Para el Teucro, que llega a Vigo con tres puntos menos que los rojillos. "La verdad es que se alejarían bastante. No sé si matemáticamente perderían sus opciones, pero sí que se les complicarían mucho las cosas porque ya tendrían que fallar muchos equipos, no solo uno", apunta Quique Domínguez, consciente también de que su equipo tampoco puede fallar más: "Éste es un partido fundamental, y los que nos quedan. Los de casa son importantísimos y los demás son vitales también, porque está todo muy igualado; somos unos cuantos equipos ahí en la lucha por los puestos de play-off y no hay que hacer ningún tipo de concesión ya a los rivales".

Para la cita de hoy están pendientes de la evolución de Alberto Casares, que sufre un fuerte esguince, y que estará "entre algodones" hasta última hora. A la baja de "Javito" se une la de Jabato, "fuera de combate" por una rotura de fibras en el isquiotibial.