Fernando Alonso tuvo un problema en su F14 T, lo que le llevó a hacer sólo 12 vueltas en el segundo y último día de test en Bahréin, una jornada que volvió a estar dominada por Mercedes, en este caso el del británico Lewis Hamilton, que tomó el relevo en el volante de su compañero de equipo, el alemán Nico Rosberg.

Tras doce vueltas Ferrari detectó que el chasis del coche de Alonso estaba dañado. En esa docena de vueltas, el español marcó un mejor cronómetro de 1:37.912. Un tiempo más de un segundo peor que el mejor del martes y que le colocó en octava posición.