La lesión de Gerard Piqué -un inesperado giro argumental en otro accidentado final de temporada azulgrana- vuelve a darle la alternativa al central Marc Bartra que, junto a Javier Mascherano, mandará en el eje de la defensa en un momento en el que el Barcelona se juega el ser o no ser en las tres competiciones.

Por su parte, Diego Costa, que también se lesionó en el encuentro de la Champions League, ha sido sometido a pruebas para determinar el alcance de su lesión, aunque el propio futbolista ha indicado a los medios antes de la revisión médica que no estará en condiciones de jugar la vuelta.

Piqué sufre una contusión en la parte derecha de la cadera y estará cuatro semanas de baja, según han informado los servicios médicos del club azulgrana.

En el partido de ida de cuartos de final de la Champions League ante el Atlético de Madrid, el central español tuvo que ser sustituido en el minuto 12 por Marc Bartra después de un encontronazo con el rojiblanco Diego Costa.

Tras el encuentro se le realizaron las pruebas médicas que han confirmado la fisura acetabular en la parte derecha de la cadera, por lo que se perderá el partido de vuelta ante los colchoneros.

A sus 23 años, Bartra suplirá durante el mes de abril la ausencia de un indiscutible en las alineaciones de Martino y, como ya pasó el pasado año, deberá asumir los galones de titular justo cuando su equipo afronta el tramo decisivo de la temporada.

No es la primera vez que el destino, en forma de lesión de uno de sus compañeros, vuelve a darle otra oportunidad al joven central azulgrana.

Ya lo hizo en abril de 2013, cuando Javier Mascherano sufrió una rotura del ligamento lateral interno de la rodilla derecha y, ante las molestias de Puyol y Adriano, el entonces entrenador, Tito Vilanova, tuvo que recurrir al central de 'La Masia' para afrontar la eliminatoria de semifinales de Champions ante el Bayern de Múnich.

Hasta aquella eliminatoria, el defensa tarraconense solo había disputado seis partidos de titular, por lo que su rendimiento era toda una incógnita debido a las pocas oportunidades que le había dado su entrenador.

Un año después, su situación en el equipo es diametralmente opuesta en cuanto a minutos de juego y experiencia. Anoche, en la ida de los cuartos de final ante el Atlético de Madrid lo volvió a demostrar con una lección de madurez, digna de un jugador que pide a gritos disputar encuentros decisivos.

Renovado hasta junio de 2017, el atrevido zaguero será protagonista en el tramo final de la temporada. El tiempo y los resultados dirán si recibe el premio a mejor actor revelación de la temporada.