Es un encuentro clave. El Celta tiene mañana (22:00 horas) la primera oportunidad para dejar virtualmente sellado el objetivo. Luis Enrique reconoce la importancia del choque ante el Rayo Vallecano. Cita la palabra que muchos técnicos y futbolistas rehúyen. "Nos planteamos el partido de Vallecas como la primera final hacia la permanencia". Ganar en tierras madrileñas sería casi definitivo. La meta estaría al alcance. Para unos de un empate (40 puntos) y para los más comedidos a una victoria (42).

El preparador gijonés llegará a ese encuentro clave con todos sus hombres disponibles. En su lista de 18 jugadores apenas hay novedades. Welliton, Levy Madinda y David Costas se quedan en Vigo. El central redondelano podría participar en el duelo vital del Celta B del próximo domingo (17:00 horas) frente al Sporting de Gijón B. Sobre Rafinha, Luis Enrique ha restado importancia a que entrenase de forma individual durante el inicio de la semana. "Está disponible para jugar. Las diferencias de su entrenamiento son sólo por precaución", afirmaba el preparador gijonés.

Sobre el duelo de Vallecas señaló que "es un partido muy estimulante". Luis Enrique manifestó que el enfrentamiento entre franjirrojos y celestes va a ser bonito de ver para el espectador. "El Rayo Vallecano es un equipo que juega muy bien al fútbol, que quiere el balón y que siempre va a por el partido". Además, el preparador asturiano afirmó que los hombres de Paco Jémez son "claramente" un rival directo.

Por otro lado, Luis Enrique declaró que el once que presente mañana en Vallecas dependerá primero del "estado físico y mental del jugador durante la semana y después en función de las características del adversario". En principio, las principales incógnitas de la formación inicial residen en el eje de la defensa y en quién ocupará el pivote defensivo. Fontás podría regresar a la medular (es su puesto habitual en los encuentros a domicilio) y la pareja de centrales podría estar formada por Cabral y Aurtenetxe.