Carlos Mouriño, presidente del Celta de Vigo, ha mostrado hoy su deseo de que el centrocampista hispano brasileño Rafinha, cedido este curso por el FC Barcelona, continúe una temporada más jugando en Balaídos, aunque ha dejado claro que todo dependerá de la decisión que tome el conjunto catalán.

"El primero que tiene que decidirse es el Barcelona. Si por nosotros fuera lo renovaríamos muchos años, pero el primer paso lo tiene que dar el Barcelona y decidir si se lo lleva para el primer equipo. A nosotros nos encantaría que siguiera un año más con nosotros", ha indicado Mouriño en una conferencia de prensa.

El máximo accionista del Celta también ha hablado del futuro de Luis Enrique, al que varios medios de comunicación sitúan en el banquillo del Barça la próxima campaña si finalmente el argentino Gerardo "Tata" Martino no continúa en el Camp Nou.

"Estoy feliz y muy contento de que Luis Enrique esté con nosotros. El Barcelona nunca me ha llamado por este tema", ha indicado Mouriño, quien además ha revelado una anécdota que vivió el pasado verano cuando el equipo estaba concentrado en la localidad portuguesa de Melgaço.

"Cuando saltó la primera noticia de que él podía marcharse al Barça, el director deportivo lo llamó y le preguntó por ese tema. Su respuesta fue: tengo contrato con el Celta y esa pregunta nunca me la debiste hacer. Creo que no es momento para que nadie le vuelva a preguntar porque seguro que nos daría una respuesta similar", ha apuntado.

Sobre la reciente salida del canterano Toni, al que Luis Enrique intentó reconvertir en lateral izquierdo sin éxito esta temporada, el presidente del Celta ha manifestado que creyeron que en ese puesto podría despuntar y hacerlo muy bien "pero no fue así".

También ha negado que el Celta vaya a vender a alguna de sus promesas este próximo verano, salvo que los jugadores lo soliciten u otro club pague la cláusula de rescisión fijada.

"Estamos haciendo un equipo de futuro y si le estamos pidiendo sacrificios a la afición es porque saben que no vamos a vender a nuestros jugadores franquicia. Otra cosa es que el jugador lo pida o que algún club pague su cláusula. Por necesidad económica, el Celta no venderá a ningún jugador que considere clave", dijo.

Preguntado por el futuro del central argentino Gustavo Cabral, que finaliza contrato con la entidad el próximo 30 de junio, Mouriño ha destacado: "Es un magnífico jugador pero nuestra política es renovar al principio o esperar a cuando ya no nos juguemos nada porque no es bueno distraer a los jugadores de lo realmente importante".