Luis Enrique ya sabe a qué atenerse para el duelo mañana San Mamés. El entrenador celeste podrá finalmente disponer para el histórico estreno del nuevo campo del Athletic del portero Yoel Rodríguez aunque, como se sospechaba, no podrá contar con el internacional danés Michael Krohn-Dehli, lesionado en el entrenamiento vespertino celebrado el pasado viernes en A Madroa.

Yoel, que no participó en la doble sesión dispuesta por Luis Enrique el viernes debido a unas molestias estomacales, se ejercitó ayer con normalidad en Balaídos y estará a punto para defender la meta céltica contra los leones. La mala noticia para el técnico del Celta es que no podrá disponer de Michael Krohn-Dehli por una lesión muscular cuyo calado está por determinar. Según el parte facilitado por los servicios médicos del Celta, el mediocampista danés sufre una elongación en el músculo aductor derecho. Aunque a primera vista se trata de un problema leve, el jugador será sometido el lunes a una ecografía para descartar la posibilidad de una microrrotura muscular. Luis Enrique tampoco contará para el choque con Jonathan Vila, con una sobrecarga en los músculos gemelos, ni con Jon Aurtenetxe, cedido por el Athletic hasta el mes de junio, en este caso por imperativo contractual.

Se da por seguro que el preparador celeste incluirá este mediodía en la convocatoria al delantero Santi Mina y probablemente también al centrocampista Javi Rey, que ocuparía la vacante de Krohn-Dehli. Los dos se entrenaron ayer a las órdenes de Luis Enrique en Balaídos y ninguno ha sido incluido en la convocatoria del filial para el partido que esta tarde le enfrentará en Barreiro al Marino de Luanco, con lo que se da por sentado que estarán este mediodía entre los expedicionarios que viajarán a Bilbao. Sí ha sido incluido, en cambio, entre los jugadores del filial el portero Rubén Blanco, a quien Luis Enrique tuvo que llamar apresuradamente el viernes para entrenarse con el primer equipo tras retirarse Yoel.

Contando con Mina y Javi Rey, el entrenador del Celta cuenta con 20 futbolistas disponibles para San Mamés, lo que le obliga a realizar dos descartes. A pesar de que el equipo no anda sobrado de efectivos ofensivos para el banquillo, uno de ellos será el chileno Fabián Orellana, cuya situación en el equipo se hace poco menos que insostenible, y el otro probablemente uno de los dos laterales suplentes, Bellvís o Jony.

Con estas premisas, la alineación del Celta en San Mamés debería ser muy similar a la que empató en la última jornada en Balaídos contra el Granada. Borja Oubiña regresará al eje de la línea medular y habrá algún retoque en defensa, pues Fontás volverá a la posición de central izquierdo por Aurtenetxe y el joven David Costas, pese a su buen desempeño antes los nazaríes, no parece tener del todo asegurado el puesto, que se disputaría con Cabral. Por lo demás, no se adivinan cambios.

Gustavo Cabral espera que el duelo de mañana en el Nuevo San Mamés sea la confirmación de que el Celta ha superado los problemas a domicilio de la pasada temporada. "Este año nos proponemos ser también un equipo fuerte fuera de casa. Sabemos que en Balaídos estamos bien, ya desde el año pasado, y esta temporada hemos empezado bien de visitantes y queremos seguir así", indica el defensa central céltico, que pronostica "un partido difícil y trabado" contra el conjunto de Ernesto Valverde, a la par que "ilusionante". "Es un partido muy importante para ellos y para nosotros, para ellos porque quieren ganar en la inauguración de su estadio y tendrán una motivación extra y para nosotros porque sería la segunda victoria fuera de casa. Será un lindo partido", afirma el zaguero argentino, que se muestra optimista sobre las opciones del Celta: "Tenemos un rival muy bueno, como el Bilbao, y queremos ratificar que podemos hacer las cosas bien fuera, con la misma confianza que hemos tenido de locales".