Luis Enrique ha comenzado a levantar su proyecto deportivo en el Celta por los cimientos. Desde la defensa quiere el técnico asturiano que vaya creciendo el equipo, que durante las tres primeras semanas de la pretemporada ha trabajado dos sistemas de contención: una línea de tres centrales con dos carrileros y la tradicional de una pareja de centrales y otra de laterales. Gana enteros la defensa de cinco, con la que inició los dos amistosos que lleva este verano.

Con cualquiera de las dos variantes defensivas, el conjunto celeste ha dejado buenas sensaciones. De hecho, ante un rival como el Oporto, campeón de Liga y con atacantes cotizados en el mercado, como Jackson Martínez, Silvestre Varela y Juan Iturbe, los de Luis Enrique apenas concedieron ocasiones de gol. De hecho, los lusos tuvieron que aprovechar una acción en fuera de juego para superar a Yoel, que hasta el descanso apenas se vio apurado, excepto en la doble intervención por disparos de Lucho González e Iturbe.

Luis Enrique, por lo tanto, se mostraba satisfecho tras finalizar el encuentro en el Estadio do Dragao. "Queríamos dar una buena imagen a nivel defensivo y creo que así ha sido, sin pasar muchos apuros, contra un rival de alto nivel. Estoy satisfecho en el aspecto defensivo", proclamó el exentrenador del Barcelona B y el AS Roma.

En el conjunto romano, Luis Enrique apostó también por una defensa de tres centrales y dos carrileros. Este sistema táctico se despliega como un acordeón: el 5-3-2 del que parte la idea va evolucionando en ataque hacia el 3-4-3 y reduciéndose hasta el 5-4-1 en el repliegue.

Ante el Oporto, el trío de centrales lo formaban Cabral, por la derecha, Vila, por el centro, y Fontás, por la izquierda. Mallo actuaba como carrilero derecho y Toni por el costado izquierdo. No hubo variación tras el descanso, Luis Enrique esperó a que entrasen los juveniles para pasar a una defensa de cuatro, con Goldar y Túñez como centrales, mientras que Fernán y Bellvís ejercieron de laterales. Se había superado ya la hora de partido y el Celta se adaptó mejor al cansancio y a las múltiples sustituciones para dominar el partido ante un rival que agradeció la falta de pegada de los celestes, que desperdiciaron tres claras ocasiones de gol.

"Ante un equipo de este potencial, esperaba tener muchas dificultades para dominar el balón y así ha sido en la primera parte. Es cierto que en el apartado ofensivo hay muchas cosas que mejorar. Me voy satisfecho porque han salido bien bastantes cosas de las que hemos trabajado a lo largo de la semana. El equipo ha estado a un buen nivel", proclamó Luis Enrique en la sala de prensa de O Dragao, donde volvió a apostar fuerte por una defensa de cinco, como hizo ante el Coruxo, en el primer ensayo del verano.