El CD Lugo puso fin ante el Sabadell (2-0) a su sequía de triunfos después de siete jornadas en las que solo había podido sumar tres empates, superó al fin los 50 puntos que se había fijado como objetivo esta temporada y que se le resistían, y certificó la permanencia en la Liga Adelante a falta de dos jornadas para el final de la temporada.

El equipo gallego, que ascendió la temporada pasada, ha hecho los deberes en el terreno de juego y ahora debe completarlos con la ampliación de capital que concluye este mes y que necesita para convertirse en Sociedad Anónima Deportiva, condición indispensable para que continúe en el fútbol profesional.

El Sabadell, que llegaba a Lugo con la salvación asegurada, inició el encuentro fiel a su estilo de juego a pesar de las importantes bajas de sus dos estrellas, Manu Lanzarote y el mexicano del Chelsea Ulises Dávila. Al equipo lucense le servía el empate para certificar la continuidad en la Liga Adelante, y, aunque lo intentó, se vio incapaz de romper la defensa visitante.

El equipo de Quique Setién mantuvo su falta de puntería en el arranque del segundo tiempo con una llegada de Iván Pérez que se fue a la izquierda de la portería del Sabadell.

El conjunto catalán también tuvo la suya con un desmarque de Gato, que se plantó solo en el área y Yoel, que regresó a la portería del Lugo, desplegó los puños para evitar el tanto.

Con tantas oportunidades malgastadas, el partido entró en los últimos veinte minutos con el marcador inicial, pero entonces el portero del equipo rojiblanco desatascó el juego con un pase de 80 metros hacia Óscar Díaz, que controló el esférico, dejó que botara y resolvió desde la media luna del área con una volea imposible para De Navas, que estaba adelantado.

Yoel, que regresará al Celta de Vigo cuando finalice su cesión en Lugo, fue providencial en la jugada del gol y, seis minutos después, al frustrar un remate de Arteaga, al que los gallegos respondieron con la sentencia, obra de Rubén Durán a falta de siete minutos.