El Celta B dio un paso de gigante en esta eliminatoria al derrotar al Cortes navarro con dos goles conseguidos en el último tramo de un encuentro muy peleado y disputado que mantuvo la emoción hasta el final.Ahora, a los vigueses sólo les queda cerrar la eliminatoria en Barreiro, bajo el calor de su afición.

El partido comenzó con dominio del Cortes. Los locales hicieron gala de su condición y trataron de encerrar a su oponente en el primer tramo del choque. Así, el Cortes fue quién dispuso de las primeras ocasiones para marcar. Primero, en una buena combinación por una banda que terminó con un disparo de David rozando el larguero. Y poco después un fallo en el despeje de la zaga visitante fue aprovechado por el propio David para plantarse solo ante Óscar, pero su disparo nuevamente se marchó por encima del travesaño.

Pero el Cortes no las tenía todas consigo y además el filial celtiña no acusó en ningún momento los nervios, con lo que poco a poco el filial celeste se fue estirando y asentando en el campo y al filo del cuarto de hora dispuso de su primera ocasión de gol. Tras un mal despeje de la defensa local, el balón le cayó a Camochu, pero erró el remate cuando tenía todo a su favor para marcar. El conjunto de "Pichi" Lucas continuó acercándose a la portería del equipo navarro y, en el ecuador de la primera mitad, el propio Camochu cayó dentro del área en lo que parecía un claro penalti, pero el árbitro no lo entendió así y amonestó al jugador del equipo vigués por simular la caída. Fue la primera jugada polémica en una tarde bastante apacible para los colegiados, que además casi siempre fueron ayudados por la deportividad de los jugadores en el terreno de juego.

El Cortes no renunció al partido y creó mucho peligro en sus acercamientos, sobre todo a balón parado, pero sin terminar de conectar un remate claro. Le faltaba a los navarros mayor claridad en la zona decisiva. También el conjunto olívico tenía sus llegadas y en un córner Víctor Vázquez a punto estuvo de conseguir el primer gol del partido, pero el capitán del Cortes, Iñaki, despejó muy bien el balón sobre la línea de meta.

La última ocasión antes del descanso fue para los locales, otra vez a balón parado, pero el remate de Iván se fue desviado por poco. Sirvió como colofón a una primera parte muy física y de mucha pelea en el centro del campo y en la que no se vieron goles.

El filial celtiña dio un paso adelante en su planteamiento y se lanzó a buscar el partido. A pesar del mal estado del terreno de juego, el equipo celeste comenzó a hilvanar mejor las jugadas y a rondar la portería de Ricardo, mientras que el Cortes se limitaba a esperar atrás y salir buscando el contraataque.

El Celta B dispuso de la ocasión más clara hasta ese momento en las botas de Camochu, que aprovechó un mal despeje del central Rubén para plantarse solo ante Ricardo, pero el portero adivinó su intención y evitó un gol que ya se cantaba. Fue la antesala del 0-1. El asedio era cada vez mayor y en el minuto 76 llegó el premio para los pupilos de Lucas. Benja marcó con un buen disparo dentro del área grande.

El filial celeste se encontraba muy cómodo en el partido y ni siquiera la expulsión de Camochu, al ver su segunda amarilla por simular otro penalti -el piscinazo en la segunda ocasión resultó evidente-, inquietó al conjunto vigués.

El Cortes quedó tocado tras el gol y no supo reaccionar en busca del empate. Cometió numerosas imprecisiones, tanto en ataque como en defensa. Así, en un nuevo fallo de la defensa de la escuadra navarra, llegó el segundo gol del partido. Tras un gran pase en profundidad de Santi Mina, Aitor se quedó solo ante Ricardo y consiguió batir por bajo al cancerbero local para lograr el 0-2 y dejar la eliminatoria muy favorable para los intereses del equipo celtiña.

El próximo domingo, los célticos jugarán el encuentro de vuelta en el campo de Barreiro buscando el pase de ronda.