Abel Resino se resiste a tirar la toalla. El entrenador del Celta sabe de la dificultad del reto que tiene por delante su equipo en las dos últimas jornadas, en las que tiene que adelantar a tres equipos para lograr la permanencia, pero mantiene la confianza y cree que el milagro aún es posible, para lo que es imprescindible hacer los deberes.

"Tengo fe, en el fútbol he visto cosas muy raras, creo que mientras tengamos vida hay esperanza. Pasa porque ganemos nosotros, estoy convencido de que si llegamos a la última jornada con vida podemos tener muchas opciones de conseguirlo porque en el último partido pueden pesarle las piernas a mucha gente, poca gente cree en nosotros, no tenemos nada que perder y mucho que ganar. Es lo que digo a mis jugadores, vamos a agarrarnos a esa posibilidad y si después no lo conseguimos, que nadie nos pueda decir que no lo hemos intentado, sería algo imperdonable", destacó.

El toledano solo tiene elogios para el Valladolid, que ha logrado con comodidad la permanencia, considerándolo un rival muy peligroso pese a no jugarse nada, lo que puede hacer que salten al terreno de juego más relajados. Apela a la intensidad para combatir al rival "Es el partido más importante del año y nadie puede escatimar ni un esfuerzo. Somos conscientes de que nos enfrentamos a un buen equipo y a veces que esté tranquilo no se sabe si es mejor ni peor, no tienen ningún tipo de presión pero no tenemos ninguna excusa, tenemos que meterle una intensidad al partido en todo momento, tenemos que salir con la victoria como sea, es lo único que nos vale y tenemos que pelear por ella hasta el último segundo", declaró.

Respecto a los rivales, Resino cree que su equipo tiene que centrarse en lo que suceda en el José Zorrilla y olvidarse de lo que pase en otros estadios, en los que el Celta también juega. "Lógicamente te vas enterando pero nosotros jugamos en Valladolid, no en más campos porque si no somos capaces de ganar allí, no serviría de nada. Nuestra atención tiene que estar en Valladolid y después hablaremos del resto. Tenemos que centrarnos en lo que controlamos, en lo otro no podemos hacer nada. Hay que ir a por todas, la atención tiene que estar focalizada", indicó.

La vacante que deja Jony en el lateral preocupa a Abel Resino, que ayer probó a Carlos Bellvís en esa posición. La experiencia del valenciano podría darle ventaja sobre Antón y Augusto. La opción del argentino, uno de los hombres más en forma del equipo, parece descartada por sus características, muy ofensivas, por lo que sería una posibilidad que solo se contemplaría si el partido se pone cuesta arriba. El técnico céltico sabe que solo vale la victoria pero no por ello va a descuidar el aspecto defensivo.

"Hay que valorar todo, si quieres apostar de una forma descarada. El partido son noventa minutos, muy largo, además ante un equipo como el Valladolid hay que defender bien, es un equipo con una gran posesión de balón, juega bien y necesitamos hacer una gran defensa. En ataque hay que ir con todo porque no nos vale otra cosa que ganar, está clarísimo, pero qué duda cabe que para ganar hay que defender bien. Si no defiendes bien difícilmente podrás ganar", señaló.

Por último, Resino espera un recibimiento normal de la que fue su afición hace dos temporadas: "Me fui bien de allí, no tengo ningún problema, mi comportamiento fue correcto".