El ciclista Mark Cavendish (Omega Pharma) se ha impuesto en la decimotercera etapa del Giro de Italia, disputada entre Busseto y Cherasco sobre 254 kilómetros, y suma su cuarta victoria parcial en esta ronda italiana, mientras que Vincenzo Nibali (Astana) mantiene la 'maglia rosa' de líder en una jornada en la que no tomó la salida Bradley Wiggins (Sky).

El pelotón, tirado los equipos con velocistas y el Cannondale al final, neutralizó a Caruso (Katusha), último superviviente de la fuga del día a 1,5 kilómetros de meta, y los hombres rápidos protagonizaron una dura pugna por vencer en la que Mark Cavendish volvió a ser el más fuerte.

Al de la isla de Man no le fueron necesarios ayudantes y él solo partió desde lejos para, por la derecha, ir superando rivales hasta quedarse solo con Nizzolo (Radioshack) y Mezgec (Argos-Shimano), tercero como ayer, que le aguantaron mejor que un Viviani (Cannondale) a quien se le hizo larga la recta final después de superar la etapa más larga de esta edición.

Con la mayor parte de la larga etapa con buen clima, lejos del aguacero del último día, fueron muchos y constantes los intentos de formar una fuga hasta que, sobre el kilómetro 30, siete corredores consiguieron entrar en la que parecía la buena y definitiva, si bien no fue así por el trabajo de los Omega Pharma en el pelotón.

La fuga inicial llegó a contar con 13 minutos de diferencia, anulados prácticamente tras coronar el primero de los repechos de los últimos 75 kilómetros, Tre Cuni (3ª categoría), pues solo había unos escasos 20 segundos de diferencia con el gran grupo, donde Niemiec (Lampre), séptimo en la general, se fue al suelo y volvió a entrar sin más consecuencias.

No obstante, un valiente Pablo Lastras (Movistar) no dejó de creer nunca en la fuga, y pese a la paliza que se había dado durante casi 200 kilómetros, siguió tirando con Bak (Lotto-Belisol) y Boem (Bardiani) para formar una nueva escapada, sin éste último, pero con siete corredores más.

Lastras llevó el peso y lideró al 'grupeto', pero a falta de 1,5 kilómetros fueron engullidos por un pelotón hambriento, con los Cannondale con la voz cantante si bien al final su líder, Elia Viviani, fue quinto y muy lejos de la moto de Cavendish, imparable en este Giro de Italia en las etapas llanas, si bien esta jornada era sinuosa con varios, aunque cortos, repechos al final.

La otra noticia de la jornada llegó antes de la salida, ya que hubo tres bajas y dos de ellas de renombre. Aunque a más de media hora del líder, y ya no contaba para la general, este viernes puso pie a tierra el vigente campeón del Giro, Ryder Hesjedal (Garmin), igual que un Bradley Wiggins (Sky) que tras hundirse ayer y dejarse 3:34 minutos en meta, con una afección pulmonar, ha decidido abandonar dando prioridad a su salud.

De cara a este sábado, otra vez será protagonista la montaña en una etapa de 168 kilómetros entre Cervere y el puerto de primera categoría de Bardonecchia (Jafferau), un final en alto al que se llegará tras superar a 42,7 kilómetros de meta el Sestriere, de segunda categoría y coronado a 2.035 metros de altura.