Un toque de humor en la tensa coyuntura liguera, dominada por las sospechas de amaño. Carcamáns, la numerosa y activa peña celtista de A Illa de Arousa, regalará un kilo de mejillones a cada jugador del Espanyol y del Athletic si este fin de semana ganan sus respectivos encuentros contra Deportivo y Zaragoza, rivales del Celta en la lucha por la permanencia. Nutritivo incentivo para equipos que poco o nada se juegan en el envite.

Los habituales rumores de final de temporada se multiplican y encrespan. Esta vez hay una investigación oficial en curso sobre el Levante-Deportivo. Que se sepa, por la presunta implicación de algunos jugadores granotas en apuestas ilegales. El presidente de la Liga, Javier Tebas, que ha puesto los indicios que manejaba en manos de la Fiscalía Anticorrupción, volvía a insistir ayer en un acto en Gijón que el organismo que comanda "va a presentar denuncia policial ante cualquier indicio o sospecha de amaño".

Sergio Ballesteros, uno de los señalados inicialmente por Barkero durante el descanso de aquel encuentro, defendía ayer su inocencia. "El capitán del Levante no se vende, firmó su primer contrato con dieciocho años y voy a estar en el Levante hasta que me retire, punto y final, más claro agua", decía ayer. Y añadía sobre la materia concreta que se sospecha: "No me gusta ni apostar, hay que luchar a favor de la limpieza del fútbol y le doy la razón a Javier Tebas. Pero al Levante no se le puede utilizar para promover todo esto. El fútbol español está limpio, hay días malos y hay equipos que se pueden relajar cuando consiguen el objetivo". En la rueda de prensa que la Agencia Efe recoge, aseguraba que Barkero no ha sido capaz de explicarle por qué le acusó de irregularidades y confirma que estudia con su abogado la posibilidad de demandar a su compañero. "Yo no soy tan rencoroso para no perdonar, pero mi honor y mi profesionalidad quedan por delante de cualquier insinuación", explicaba.

Si bien este es el único asunto que transcurre por cauces legales, las suspicacias florecen con libertad como en todas las clausuras de campeonato. Ayer, en Abegondo, un grupo de aficionados del Deportivo colgó una pancarta que rezaba: "Año tras año el maletín salva al maño". Reinciden en la acusación hacia el presidente del Zaragoza, Agapito Iglesias, que ya efectuó de forma más que velada el presidente del Granada, Quique Pina, en la pasada temporada. Aunque a Pina y a otros los señalen a su vez desde Zaragoza, en un tótum revolútum.

Y en estas irrumpe Carcamáns. "Xa que se pode comprar partidos, desde Carcamáns ofrecemos 1 Kg de mexillóns a cada xogador do Español e Athletic por gañar este finde", se afirma en la cuenta oficial de Twitter de la peña. El presidente del colectivo de hinchas célticos, Belermo Dios Dios, confirma que hace la propuesta "medio en serio, medio en broma", pero dispuesto a cumplirla.

Se trata, o sea, de incentivar el espíritu competitivo de los catalanes en Riazor y de los vascos en La Romareda a fin de que el Celta llegue vivo a las dos últimas jornadas. "Dinero no manejamos. Y si lo tuviésemos, se lo dedicaríamos a cosas más importantes en esta época de crisis", argumenta Dios. "Pero mejillones sí tenemos". De los 700 miembros de la peña, más de 300 trabajan como bateeiros.

Belermo Dios concreta detalles del regalo. Si los equipos mencionados cumplen, Dios hablará con el Consello Regulador do Mexillón y preparará el envío con esmero: "En condiciones, que sean grandes y estén depurados", anticipa sobre el producto. "Porque además sería una forma de promocionarlo". Y con el descargo moral de haber primado a los futbolistas por ganar.

La iniciativa de Carcamáns, "hecha con ironía", según Dios, y a la vez porque el club céltico "no está diciendo nada sobre los amaños", encuentra eco en las redes sociales. Incluso hay quien se le une. La Peña Celtista Orisorfais, de Redondela, asegura también en Twitter: "Nos queremos colaborar con @CarcamansCelest e damos un kilo das típicas rosquillas de almíbar ponteareanas ós xogadores de Español e Bilbao". El riesgo, este fin de semana, no será de estafa sino de empacho.