El torneo de Madrid se mantiene fiel a su tradición, no repetir un ganador dos años seguidos, y así el suizo Roger Federer no podrá alzar de nuevo el título tras ser derrotado por el japonés Kei Nishikori, mientras que el español Rafael Nadal puso la directa y alcanzó los cuartos de final.

Federer se despidió de Madrid de una forma un tanto sorpresiva, la más temprana en sus diez intervenciones. Nisikhori, 14 del mundo, de 23 años, le derrotó por 6-4, 1-6 y 6-2 en una hora y 35 minutos. "Era mi ídolo", dijo el japonés criado tenísticamente desde los 14 años en la academia de Nick Bolletieri, en Bradenton (Florida), campeón júnior de dobles en Roland Garros 2006.

"Vencerle ha sido siempre el objetivo de mi carrera, y hacerlo en una superficie que no es mi favorita, es más grande aún. Ahora necesito un par de días para celebrarlo", comentó el ganador este año en Memphis (derrotó al español Feliciano López en la final), que aspira a alcanzar su segunda semifinal de un Masters 1.000 (Shanghái 2011, contra Murray).

Fue la octava victoria de Nishikori ante un jugador situado entre los diez primeros del mundo. Hace dos años también dejó fuera de combate al serbio Novak Djokovic en las semifinales de Basilea antes de caer ante Federer en la final.

El de Basilea, campeón de Madrid en las pistas de azul del año pasado, notó en exceso los 53 días que se tomó de descanso desde Indian Wells hasta Madrid, y su derrota de hoy puede costarle cara, porque el británico Andy Murray le pasará en la clasificación mundial para ocupar el segundo puesto. El suizo, tendrá que esperar a Roma, la semana próxima si quiere inaugurar su casillero de títulos esta temporada.

Mientras, el español Rafael Nadal sumó una nueva victoria y dejó fuera de combate al ruso Mijail Youznhy por 6-2 y 6-3 para alcanzar los cuartos y olvidarse de los malos recuerdos del pasado año.

En una tarde de sol, como le gusta a Nadal, el zurdo de Manacor se impuso en una hora y 14 minutos, sin ceder el saque en una sola ocasión y con menos errores que en el partido inicial contra el francés Benoit Paire, aunque recibió de nuevo una advertencia del juez de silla por consumir más de los 25 segundos permitidos antes de sacar, lo que provocó luego su enfado.

Nadal sumó su décima victoria ante el moscovita en 15 encuentros, con tercera paliza en tierra batida, similar a las que obtuvo en Roma en 2005 y 2007. En esta superficie Nadal es la "bestia negra" del que fuera ocho del mundo, de 30 años, que en tres enfrentamientos solo ha podido ganarle 11 juegos.

La ronda de octavos en Madrid no le traía buenos recuerdos a Nadal. Fue aquí donde cayó contra su compatriota Fernando Verdasco el pasado año, después de liderar el último set por 5-2. Fue aquí también donde prometió que no volvería a Madrid si no cambiaban y mejoraban las pistas, entonces azules y con problemas de deslizamiento. Pero este año se encuentra cómodo en su color de tierra favorito, el rojo.

El dos veces campeón en Madrid suma ya su victoria 27 en este torneo. La de hoy le ha valido su acceso a unos cuartos del Masters 1000 por 55 vez en su carrera.