El Celta supo sobreponerse a la injusta expulsión de su central David Goldar, en una acción en la que chocó cabeza contra cabeza contra un jugador del Real Madrid. Para sorpresa de todos, el colegiado Loira Rodríguez enseñó la segunda amarilla al defensor céltico, que incrédulo, tuvo que marcharse a los vestuarios.

En principio, el Celta recurrirá la expulsión para que pueda estar en las semifinales junto a sus compañeros, ya que es una pieza clave en la zaga de David de Dios, que destacaba al final del partido sobre la polémica acción y un posible recurso que "todavía no hemos hablado del tema. Vamos a verlo y si podemos recurrir lo haremos, ya que si puedo contar con dieciocho jugadores mejor que mejor".