El presidente del Levante, Francisco Catalán, aseguró ayer que el consejo de administración del club confía en la "honorabilidad y profesionalidad" de sus jugadores frente a las informaciones referidas a presuntas irregularidades en el partido de la Liga ante el Deportivo de La Coruña pero que si se demuestra lo contrario, tomará medidas después de que el presidente de la Liga de Fútbol Profesional, Javier Tebas, le haya trasladado que tiene "indicios" de que algo turbio pudo haber sucedido en ese partido.

Según reveló ayer "El larguero" de la Cadena Ser los indicios a los que se refiere la LFP son una conversación grabada a un futbolista del Levante con un compañero de un equipo involucrado en la pelea por la permanencia. En esa charla el jugador del conjunto granota habría preguntado cuánto estarían dispuestos a pagar por derrotar al Deportivo ya que manejaban una oferta para dejarse ganar. Esa conversación llega a la Asociación de Futbolistas Españoles -que preside precisamente Luis Rubiales, exjugador del Levante- que se la traslada a la LFP y a la Policía que está investigando el caso. Esa es la información que la Liga pone en conocimiento del consejo de administración del Levante y lo que les lleva a convocar una reunión de urgencia para analizar la situación. Ese es el motivo por el que en la rueda de prensa de ayer el presidente del club valenciano deja abierta la posibilidad de que "haya algo" y que en caso de que fuese así tomarían las medidas que fuesen necesarias.

"Tras la últimas noticias aparecidas sobre supuestas irregularidades en el partido ante el Deportivo el consejo de administración del Levante ha decidido ponerse a disposición de la LFP, la Asociación de Futbolistas Españoles y la RFEF para colaborar en cualquier investigación que estuviera en curso o se pueda producir", dijo Catalán. En su alocución, Francisco Catalán ha insistido en que el Consejo "cree en la profesionalidad y la honorabilidad de la plantilla de jugadores que ha sido protagonistas de los logros más importantes en la historia del club".

En ese sentido, y a preguntas de los medios de comunicación, ha asegurado que: "Creemos firmemente en nuestros jugadores, pero si esta opinión cambia, el Levante tomará las medidas oportunas para que cualquier jugador que pudiera haber hecho eso no pueda seguir jugando en el Levante".

"Nosotros no somos policías ni detectives. Somos un consejo de administración, somos un club de fútbol, pero lógicamente todo esto está haciendo mucho daño a la institución, porque los más perjudicados no son los jugadores, es el club, ya que las personas pasan pero la institución se queda y vamos a hacer todo lo posible para que la imagen no sea dañada", ha añadido.

Catalán ha confirmado que ha hablado con el presidente de la LFP, Javier Tebas, quien le ha trasladado "la información que tiene y esos indicios" de posibles irregularidades en el citado partido ante el Deportivo.

Mientras tanto en Vigo siguen con atención los acontecimientos. En el Celta evitan pronunciarse de forma pública sobre la investigación abierta en la Fiscalía Anticorrupción e insisten en que lo primordial ahora mismo es centrarse en los esfuerzos del equipo por conseguir la permanencia.