Mark Webber, estará al volante de su bólido de Red Bull en China, afirmó ayer su padre a los medios australianos para despejar las dudas tras la discusión con su compañero de escudería, Sebastian Vettel. "Estaremos en China para la siguiente (competición)", declaró Alan Webber a la cadena local ABC.

Vettel ignoró las órdenes de la escudería de permanecer en la segunda posición, por detrás de Mark Webber, al que adelantó a falta de diez vueltas para el final. En la antesala del podio, Webber recriminó a su compañero de manera reiterada su actitud.

El padre de Webber apuntó que cree en la "sinceridad" de las disculpas posteriores de Vettel, pero consideró que "tomará algún tiempo para que nuevamente se gane el respeto y la confianza" de su hijo. "Sebastian desobedeció las órdenes del equipo y principalmente ha desilusionado al equipo, quizás a casi todos sus miembros".

El padre de Webber también subrayó que Dietrich Mateschitz, uno de los copropietarios de Red Bull, le ha asegurado que el puesto del corredor está "asegurado" dentro del equipo. Sin embargo, el italiano Flavio Briatore, que ejerció durante su carrera en la Fórmula 1 como mánager de Webber, cree que la relación con Vettel "no se podrá arreglar". Briatore pronostica que su exdiscípulo abandonará Red Bull al acabar el ejercicio. "Seguro. El año pasado ya hubo problemas", rememoró. Webber, que cumplirá 37 años, tiene contrato hasta final de temporada, mientras que el contrato de Vettel se alarga hasta 2014.