El Academia Octavio afronta las horas previas a su duelo del viernes con el Palma del Río con la confianza que le proporciona su buena línea de juego, pero pendiente del estado físico de Fran González y Dasilva. El concurso de ambos veteranos se antoja necesario. El que visita el Central de As Travesas es un rival paradójico, especialmente peligroso pese a estar ya descendido.

La escuadra cordobesa, como el Frigoríficos del Morrazo, optó por no enrolarse en la patronal de clubes, ahorrándose así el canon, cuando accedió a la Liga Asobal. Una situación a la que el presidente del club, Manuel Cumplido, ha atribuido buena parte de la mala situación clasificatoria de la escuadra. Cumplido cree que Asobal le ha hecho pagar la rebeldía propiciando arbitrajes contrarios a sus intereses. "Nos querían hundir y ya nos han hundido, ya estamos abajo los dos que querían, se lo han trabajado poco a poco", decía Cumplido en referencia a que también el Frigoríficos ocupa puestos de descenso. "Hay una mano negra que influye. Una pareja arbitral de cuyo nombre no quiero acordarme les dijo en los vestuarios a mis jugadores al acabar un partido en nuestro propio pabellón que si el club hubiera pagado...". La plantilla lo ha secundado. "Cualquiera que vea nuestros partidos nota lo de los arbitrajes. La Asobal no nos quiere desde el principio y eso se nota, no nos tienen respeto", ha declarado el central checo Lubomir Vermirovsky. La patronal ha respondido recordando que es la Federación Española la que se encarga de las designaciones.

Ruido que acompaña al Palma, que con siete puntos está descendido de facto, aunque no matemáticamente. Pero no ha perdido nivel competitivo. El Valladolid, último rival, sudó para ganar y en el Octavio son cautos. "El Palma del Río es de esos rivales que nunca le pierde la cara a los partidos", asegura Cerillo a Efe. "Está jugando muy bien y hasta al final va a apurar sus opciones de mantenerse en la categoría. No nos podemos fiar de su clasificación". El extremo izquierdo insiste en el plan académico: "Todos los partidos que nos quedan en casa son finales y hay que ganarlos".