Javier Gómez Noya volvió a demostrar ayer su capacidad para adaptarse a cualquier medio al conseguir la victoria en la ,"Fuga de Alcatraz", singular competición disputada en la bahía de San Francisco y que suponía el estreno del gallego en la presente temporada.

El triatleta gallego, campeón mundial en 2008 y 2009, dominó la prueba desde el principio junto al también español Cesc Godoy, que al final fue quinto. Su autoridad resultó asombrosa, mucho más al tratarse de la primera competición del año para un deportista que también se despidió de 2012 ganando sus últimas pruebas.

El comportamiento de Gómez Noya fue espléndido de la misma manera que lo fue el rendimiento de Cesc Godoy. Con una natación muy rápida, los dos españoles dominaron la prueba desde el inicio, Godoy fue el primero en tocar tierra, con Gómez Noya a sus pies, Junto a ellos O'Grady, y más atrás liderando al grupo perseguidor Jacobs a solo 40 segundos. Y con él, el resto de favoritos. La dura primera transición permitió conseguir más ventaja a los españoles que se subieron a la bicicleta junto a O'Grady con 1:28 sobre el grupo de Jacobs, el que parecía principal rival del ferrolano dada su capacidad y costumbre en esta clase de pruebas.

El segmento sobre la bicicleta resultó una exhibición de Gómez Noya que tras hacer el mejor tiempo entra primero en la segunda transición con una ventaja de 30 segundos sobre el neozelandés O'Grady que pudo aguantarle a la vista en los kilómetros finales en los que cedió un poco. Las pruebas del circuito americano impiden rodar en grupo. Cada uno corre a su ritmo sin aprovecharse de la rueda de otros participantes, una circunstancia que lastra a los corredores con peor segundo segmento. La capacidad de Gómez Noya en este sentido resultó esencial para que consolidase su ventaja sobre casi todos los participantes. Más atrás haciendo un parcial muy similar al resto de los mejores, entró Godoy a 2:20, seguido muy de cerca por Jessy Thomas que hizo un registro similar al de Gómez. Jacobs por su parte pasó quinto a 3:40 del gallego.

El tramo final de carrera a pie fue la puntilla que dio Gómez Noya al resto de participantes, eran 12 kilómetros por un terreno irregular, asfalto, playa, escaleras. En ese territorio el gallego pronto puso tierra de por medio con O'Grady para ir relajado el tramo final. Su autoridad a pie quedó fuera de toda duda. Así a la entrada de la playa su ventaja casi se iba a los dos minutos, por detrás Thomas atrapó a Godoy esfumándose la posibilidad de doblete, mientras que Jacobs avanzaba a gran velocidad demostrando que ese segmento es en el que mejor desarrollo alcanza. Finalmente Gómez levantó el pie y entró como vencedor con una ventaja de 1:12 sobre el neozelandés Graham O'Grady y 2:13 sobre Jessy Thomas.

A la conclusión de la prueba Gómez Noya dijo que "tras tantos temores los días previos no he notado mucho el frío. Me puse gorro de neopreno y una capa de vaselina bajo el traje. Más que la temperatura nos han afectado la corriente y el viento en contra. En otras ediciones los primeros han hecho 21 minutos; hoy 27. Hemos ido siguiendo a un barco que nos ha llevado haciendo una L porque la ruta más directa era más lenta".

En bici los dos españoles fueron juntos durante los 5 primeros kilómetros llanos, para llegados los repechos quedarse en solitario: "Decidí tirar a tope para poder llegar con ventaja a la transición. Aunque en EEUU hay triatletas potentes acostumbrados a las competiciones sin pelotón, ninguno se me acercó".

Dado su nivel en la tercera fase estaba claro que no iba a tener problemas para aguantar o hasta incrementar la ventaja pero: "Al poco de salir a correr se me cruzó un perro grande y me lo tragué. No me caí pero le metí un buen golpe con un muslo en su cabeza. Durante la carrera no me ha dolido pero al acabar lo estoy notando. Espero que no sea nada y me baje la inflamación pronto". En el punto de vuelta de la playa ya pudo comprobar como la ventaja era superior al minuto y se pudo tomar el famoso tramo de escaleras con calma: "son de tablones y hay arena entre ellos, hay que ir con cuidado para no tropezarse; menos mal que pude subir con tranquilidad y a partir de ahí celebrar la victoria entre el pasillo de gente".