Iago Aspas volvió a marcar frente al Granada después de seis encuentros consecutivos sin ver puerta. El moañés celebró ayer su reencuentro con el gol y explicó que espera que su tanto a los nazaríes le dé confianza para incrementar su cuenta, que ascienda ya a nueve dianas, en los próximos partidos. "Volver a marcar me da confianza y cuando es un gol que aporta y ayuda a conseguir la victoria mucho mejor. Esta victoria nos llena un poco más de moral pero no podemos subirnos a los altares porque el lunes tenemos un duro partido contra el Sevilla", indicó el atacante moañés al término del entrenamiento celebrado en A Madroa.

El máximo artillero celeste valoró igualmente el hecho de que el triunfo tan obtenido ante el Granada mejore de forma considerable la situación del Celta en la batalla por la permanencia en Primera División. "Esta jornada nos vino bien porque casi todos nuestros rivales perdieron o empataron como el Zaragoza y ahora los tenemos a todos a mano, pero para mí lo más importante es ir partido a partido", apuntó.

El futbolista canterano se refirió al difícil calendario inmediato que debe afrontar el equipo, que en este mes de mayo recibe en Balaídos a los dos grandes, Real Madrid y Barcelona, y visita el Ramón Sánchez Pizjuán y Riazor. "Yo firmaría por seguir en las situaciones en que estamos ahora después de estos cuatro partidos", confesó. Y precisó: "Eso supondría que cuando nos enfrentáramos a un rival directo, si conseguimos ganarle, saldríamos de esta situación en la que estamos".

Iago Aspas, por otra parte, se mostró crítico con el horario elegido por la Liga de Fútbol Profesional (LFP) para la celebración del próximo clásico gallego en Riazor. "Para la afición es una putada y así me lo han transmitido algunos amigos que a lo mejor no pueden ir a Riazor porque tienen que trabajar. Pero ya no es sólo el horario sino también el desplazamiento que hay que hacer", censuró el punta céltico, que acumula cuatro amonestaciones y está a una de ser suspendido.