Compitiendo con equipos como Barcelona, Real Madrid o Atlético de Madrid nadie está a salvo de recibir una goleada en la Liga española. El Celta, uno de los recién ascendidos, aparecía a priori como víctima propiciatoria de los grandes depredadores. A falta de dos partidos para completar la primera mitad del campeonato, los de Herrera no solamente se han blindado contra los mejores rematadores del mundo sino que han plantado cara a todos sus rivales. Es más, han estado con vida hasta los últimos instantes de los diecisiete partidos que llevan disputados. Han luchado en igualdad contra rivales más experimentados, con mayor potencial y presupuesto. económico.

Los números de los célticos, igualados a puntos con el que cierra la zona de descenso, no invitan a mantener el optimismo en estos momentos. No obstante, el equipo de Herrera ha mostrado gran competitividad en todos los terrenos y ante rivales de todo pelaje. A esa buena imagen, que casi nunca ha ido acompañada de resultados positivos, se agarra el conjunto vigués para afrontar con confianza el resto de la temporada.

El Celta dejó sus credenciales de equipo competitivo en la primera cita del curso. Abrió la temporada ante el Málaga, que días después se estrenaba en la Liga de Campeones. Es verdad que el equipo andaluz se llevó los tres puntos en juego de Balaídos, pero sin merecerlo.

En la cuarta jornada visitó Mestalla para enfrentarse a un Valencia que también continúa en la Champions. Los valencianos sudaron para ganar a un Celta plagado de jóvenes canteranos que daban sus primeros pasos en la máxima categoría. En esa misma jornada, el Barcelona ganaba 1-4 en Getafe. El equipo catalán se había estrenado con una goleada ante la Real Sociedad (5-1). Por su parte, el Atlético de Madrid le había ganado por 4-0 al Athlétic en el Calderón.

En la octava jornada, los célticos se preparaban para visitar el Bernabéu. El actual campeón de Liga había despachado al Granada con un 3-0 y al Deportivo con un 5-1. Sin el portero titular, los de Herrera parecían la víctima propiciatoria para que Cristiano Ronaldo impidiese que Messi se escapase en la clasificación de máximos goleadores.

La estrella portuguesa solamente pudo superar al portero céltico, Sergio Álvarez, desde el punto de penalti. Una pena máxima muy discutida por el equipo vigués, que consideró excesivo el castigo para el leve empujón de Cabral sobre Özil.

En el siguiente desplazamiento, a los célticos les esperaba Leonel Messi, quien ya buscaba superar el récord de goles en un año, que poseía el alemán Gerd Müller. El argentino fue padre horas antes de enfrentarse al equipo vigués, que tapó todas las líneas por las que se movía Messi, que acabó sin marcar ante Varas. El Celta, sin embargo, se llevaba el resultado más abultado de lo que va de temporada. El 3-1 que estableció Jordi Alba se produjo tras un clarísimo fuera de juego del lateral azulgrana.

En los dos anteriores encuentros, los de Tito Vilanova le habían marcado cinco goles al Rayo Vallecano y al Deportivo. El Celta había plantado pelea a los catalanes hasta que el árbitro quiso. El conjunto vigués dejaba una excelente impresión y acaparaba muchos elogios ante un equipo de leyenda.

La visita al Vicente Calderón se convirtió en otro gran reto para el Celta. Era el partido que cerraba el año 2012 y que llegaba en un momento peligroso, pues los rojiblancos se habían convertido en la sorpresa del campeonato. Se les consideraba capaces de plantarle cara al todopoderoso Barcelona, que una semana antes dejó sentenciada media liga al golear (4-1) al equipo de Radamel Falcao.

El colombiano se había ganado el título honorífico de mejor delantero centro del mundo. Había sumado más goles que todo el Celta, 17 frente a 16, cuando se encontraron en el Calderón. Falcao, que le había marcado cinco tantos al Deportivo, no pudo superar a Varas, que solo cedió ante el afortunado disparo por la escuadra de Adrián.

Equipos que están realizando una gran temporada, como Levante, Rayo Vallecano y Betis no se han salvado de alguna goleada. Incluso el Barcelona encajó cuatro goles en su visita a Riazor, donde marcó cinco tantos.

Los azulgrana, junto con Real Madrid, Osasuna, Valladolid, Málaga y Celta continúan sin perder por goleada. Los de Herrera suman 15 puntos, pero en todos los partidos se han mostrado muy competitivos.