El Granada no ha podido pasar del empate (0-0) en Los Cármenes ante el Elche, en el partido correspondiente a la eliminatoria final de los 'play-off' de ascenso a la Liga BBVA, que el conjunto andaluz tuvo en su mano por medio de Abel, que en el tiempo de descuento desperdició en dos oportunidades un penalti, el cual detuvo el meta Jaime, que se erigió como héroe ilicitano a última hora.

El cuadro que dirige 'Fabri' mostró durante todo el encuentro y sobre todo tras el descanso que quería viajar al Martínez Valero con ventaja frente a un Elche bastante conservador. Los granadinos apabullaron a su rival en la segunda parte, pero la suerte esquivó a los locales que pegaron dos palos y ni siquiera pudieron convertir un gol desde el punto de penalti.

Como está siendo habitual en este nuevo formato de pugna por el ascenso, la contienda comenzó con dos equipos que intentaban sacudirse la tensión del momento con un inicio muy acelerado en el que a punto estuvo de sacar ventaja el Granada. En el primer minuto Ighalo controlaba sólo dentro del área, pero su fuerte volea era detenida por Jaime.

Los rojiblancos, espoleados por el graderío de un abarrotado Los Cármenes, querían intimidar a su rival y poco después el meta ilicitano tenía que desbaratar un disparo de Collantes desde la frontal. Los de Fabri querían buscar el robo rápido de balón en medio campo para conectar en pocos pasos con la delantera en la que Ighalo era la referencia. No obstante, la experimentada y expeditiva zaga verdiblanca supo contener al potente ariete nigeriano.

Por su parte, los visitantes supieron asentarse en el terreno de juego tras la efervescente salida de los granadinos, queriendo construir un fútbol más elaborado que se diluía en los últimos metros, sin encontrar a un Ángel demasiado sólo en punta de ataque. Con el paso de los minutos el partido paulatinamente fue entrando en una fase escasa de ritmo y en la que las faltas, el centrocampismo y la imprecisión fueron los protagonistas.

Sin embargo, la recta del primer acto ambos conjuntos mostraron sus credenciales. A diez para el final el cuadro andaluz rompía la calma tensa del duelo con una fulgurante contra, que Dani Benítez culminaba con gran disparo que desviaba Jaime. En la jugada siguiente el Elche respondía de idéntica forma con un contragolpe que dejaba a Xumetra sólo ante Roberto, que paraba el disparo raso del visitante. Los contendientes mostraban sus armas y dejaban la emoción para la segunda parte.

El gol rehuye al Granada

Tras el paso por vestuarios, el Granada quiso hacer valer su condición de local y comenzó mandando en los primeros compases y avisando de sus intenciones a los de Bordalás. Tras dos llegadas con peligro pero sin precisión, los locales rozaban el 1-0 pero Orellana remataba fuera de manera incomprensible un excelente envío de Ighalo, cuando el argentino se encontraba completamente libre de marca en el área pequeña.

Los andaluces no que cejaban en su empeño y poco después Ighalo no llegaba por centímetros a un centro con rosca y envenenado del omnipresente y brillante Benítez. El Granada estaba echando el resto mientras que el Elche ya no gozaba de la posesión de la primera parte y comenzaba a mostrar ciertos síntomas de debilidad. Sólo un duro disparo de Albacar desde la frontal que detuvo el meta local, puso la nota ofensiva de los suyos, que poco a poco comenzaban a retroceder.

Consciente de que sus pupilos tenían cerca la oportunidad de poner en franquía la eliminatoria y recurrió al ídolo local, Alex Geijo para dar mas mordiente a su vanguardia y a pesar de que el hispano-suizo era duda para este encuentro. El gran goleador granadino pudo convertirse en la figura del encuentro en su regreso, pero a un cuarto de hora del final su mano a mano ante Jaime terminaba en el palo para desesperación del graderío local.

Los últimos minutos constituyeron un auténtico asedio local ante un Elche que se sostenía con dificultades frente al ímpetu rojiblanco. Al filo de la conclusión la polémica llegaba a Los Cármenes, Abel enganchaba una excelente volea desde fuera del área que impactaba en el larguero. Collantes conseguía el gol en el rechace pero Pino Zamorano lo anulaba por una falta inexistente desatando las iras del público.

Justo a 30 segundos del final, el fútbol parecía hacer con el Granada, que tuvo premio a su fe en el descuento. Vasco Fernandes derribaba a Geijo al filo del pitido final y el colegiado no dudaba en señalar la pena máxima. Abel erró ante Jaime aunque el árbitro mandó repetirla. El mismo jugador repetía lanzamiento pero volvía a encontrarse con Jaime, que con sus dos grandes intervenciones, desesperaba al Granada y dejaba con vida a los suyos de cara al partido de vuelta.